ERP. En el marco del 28.° Encuentro Empresarial del Norte, Samuel Rotta, director ejecutivo adjunto de Proética dio a conocer que solo el 10 % de la población peruana cree que el Gobierno es eficiente en la lucha contra los actos de corrupción. Esta cifra es notablemente baja y refleja a una sociedad que no confía en su propio Estado ni en los procesos que realiza.
Otro dato alarmante que mencionó Rotta, fue que el 68 % de la población peruana cree que el crimen organizado ha penetrado en la política del país, de igual modo, 71 % de la población cree que ha aumentado el nivel de corrupción y 49 % piensa que la situación no va a mejorar. A esto se suma otros motivos por los cuales la desconfianza incrementa cada vez, pues más del 90 % de alcaldes del Perú estaban siendo investigados por actos de corrupción en abril del 2014.
Ante la preocupante situación, Samuel Rotta sugirió seis medidas de trabajo, entre las cuales resaltaron: el monitoreo y la auditoría que deben ir de la mano de incentivos financieros para los colaboradores. Igualmente, las autoridades deben sentir que pueden ser sancionados por la ciudadanía. “La descentralización del poder juega un papel muy importante, en tanto haya capacidades locales y altos niveles de participación ciudadana. Los medios de comunicación tienen el deber de ejercer de manera positiva su influencia en la opinión pública”, resaltó.
Reformas institucionales
El presidente de Transparencia, Allan Wagner, manifestó su enérgico rechazo a los candidatos que han sido imputados por delitos de corrupción y que pese a esto, se conviertan en representantes del pueblo en el Congreso. Asimismo, afirmó que se exigirá la imposición de sanciones políticas y multas por la recepción de aportes ilícitos durante el financiamiento de campañas políticas.
“Estamos convencidos de que cuando se compruebe la recepción de aportes ilícitos en las campañas políticas, se tomarán acciones políticas inmediatas que signifique el retiro del candidato o de la organización política en el proceso electoral”, añadió Allan Wagner.
Además, manifestó que la corrupción junto a la seguridad ciudadana es el problema más importante de nuestra sociedad. “La corrupción no está solo en el sector público, debemos analizar e implementar medidas también en el sector privado”, recalcó.
Allan Wagner dio a conocer las herramientas que se planea implementar en Transparencia para lograr un trabajo efectivo. En tanto, indicó que se ha creado un sistema de justicia especializado en delitos de corrupción, el cual está paulatinamente en marcha. También se ha propuesto la creación de un sistema único de información en línea que conecte a la PNP, Ministerio Público, Tribunal Judicial y Ministerio de Justicia.
Además se planea convertir a la Corte Suprema en una aliada excepcional y no en una tercera instancia, como lo es hoy. Reformar la constitución actual del Consejo Nacional de la Magistratura, será otra de sus acciones, para que sus miembros sean elegidos de una manera diferente.
“Estableceremos alianzas entre el Estado y el sector privado para promover la integridad empresarial y crearemos organismos de apoyo para micro y pequeñas empresas puedan implementar medidas de prevención para evitar actos de corrupción”, sostuvo Wagner.
Respecto a la articulación entre el comportamiento de la sociedad y los procesos de innovación, Baltazar Caravedo, doctor en Sociología por la Pontificia Universidad Católica del Perú, explicó que no hay organizaciones sanas en “sociedades enfermas” y que se debe revertir el proceso de enfermedad de nuestra sociedad. “En una sociedad enferma hay una cultura incongruente, emergencia continua de conflictos sociales, democracia inconsistente, incapacidad del Estado para lidiar con los problemas sociales”, afirmó.
Finalizó su participación destacando que la fuerza vital para la transformación de la sociedad proviene del empresariado.