ERP. Tras las constantes agresiones de las que vienen siendo victimas diversas personas por su supuesto vinculo con la empresa minera, los pobladores de Pacaipampa, Elva Flores y Lazaro Ruiz Córdova, quienes fueron castigados por miembros de la Ronda Campesina de Huamcabamba exigen a la Fiscalia de Piura y Ayabaca a acelerar sus denuncias y sancionar con todo el peso de la Ley a sus castigadores.
Ellos además indicaron que temen por sus vidas porque constantemente vienen siendo amenazados por sus atacantes.
“Incursionaron en mi domicilio en mi casa en Pacaipampa, posteriormente me trasladaron a la base de Curilcas , y es ahí donde fui agredido con golpes en el cuerpo y a latigazos; de ahí nuevamente nos llevaron a la central de Bellavista, es aquí donde me torturaron . He reconocido a varios de mis atacantes y por eso que temo por mi vida y la de mi familia” , relató Lazaro Ruiz.
Por su parte, Elva Flores, narró que a ella trataron de quitarle la vida, pues fue castigada de la misma manera e incluso colgada hasta en dos oportunidades hasta perder el conocimiento. “Me siento muy mal y es muy doloroso lo que nos hacen simplemente por no estar de acuerdo a su manera de pensar de ellos” sentenció.
Al igual que estas personas , el pasado 29 de diciembre, en el interior de la parroquia San Pedro Apóstol de la provincia de Huancabamba, un grupo de ronderos- según la policía- privó de su libertad al S.S. (r) Manuel Julca Campos sometiéndolo al castigo ronderil por ser trabajador de la empresa minera Río Blanco. Por su parte el Párroco, Fray Jorge Rumi Cóndor, representante de la iglesia en Huancabamba se pronunció y de manera enérgica cuestionó los actos de violencia suscitados en la Casa de Dios .
“ Rechazamos cualquier acto de violencia que se haya ejercido contra el mencionado ciudadano” empieza su pronunciamiento realizado a través de la cuenta oficial de Facebook de la parroquia. Según refiere el comunicado , los miembros de las rondas , mediante documento solicitaron la prestación del local eclesiástico, con la finalidad de reuniones de coordinación, sin embargo fueron utilizadas para atentar contra la vida humana.
Además, el comunicado de la iglesia indica que lamenta los hechos suscitados. “desde ya nos reafirmamos en decir que hemos tenido pleno desconocimiento y solicitamos e invitamos a las partes involucradas en los lamentables sucesos suscitados, a recurrir al diálogo como herramienta pacífica en la solución de los conflictos, a fin de evitar o prever nuevos actos de violencia o imposición”, concluye.
Por su parte, el presidente de la Ronda Campesina, Octavio Cunaique, indicó desconocer dichas agresiones, y aseguró que cada comunidad tiene sus propias autoridades, y son ellas las responsables de aplicar sus leyes. "Yo no tengo esa capacidad de poder controlar a cada central, o comunidad, cada uno de ellas cuida sus propios territorios a base de sus propios acuerdos", indicó. Además, refirió desconocer el comunicado propagado por la iglesia de su jurisdicción.