ERP. La tala ilegal es una de las principales actividades que afecta este frágil ecosistema. La Municipalidad Provincial de Talara y el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (SERFOR) del Ministerio de Agricultura y Riego, acordaron iniciar acciones para conservar los bosques secos de Pariñas, afectado por la tala ilegal, y hábitat de la cortarrama peruana (Phytotoma raimondii), ave endémica en peligro de extinción.
Este ecosistema árido se ubica a 20 kilómetros del distrito de Pariñas y constituye uno de los principales pulmones de la provincia, donde existen especies forestales como los algarrobos, sapotes, palo negro y faiques; que en los últimos años han disminuido considerablemente debido a la tala indiscriminada, por el uso de estos recursos como leña.
Esta situación afecta el hogar de la fauna silvestre como la emblemática cortarrama peruana, un ave que junto al chilalo y la soña, se han adaptado al bosque seco; al igual que el zorro y la iguana.
Para hacer frente a esta problemática se reunieron Dante Talledo Chumpitaz, gerente de Servicios Públicos del municipio talareño y Juan Otivo Meza, responsable de la Administración Técnica Forestal y de Fauna Silvestre (ATFFS) Piura, órgano desconcentrado del SERFOR, quienes acordaron iniciar gestiones para declarar la zona como Área de Conservación Ambiental por su diversidad biológica y valores asociados.
Como parte de este trabajo se convocará a instituciones públicas, privadas y colectivos sociales como el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por Estado Peruano (SERNANP), el Gobierno Regional de Piura, la Universidad Nacional de Piura, municipios distritales, Naturaleza y Cultura Internacional, SOS Cortarrama Peruana, entre otros.
Otivo Meza del SERFOR destacó los beneficios sociales, económicos y servicios ecosistémicos que ofrece el bosque seco. “Por ejemplo, en Talara se podría aprovechar las algarrobas como insumo para la algarrobina y derivados, así como para la ganadería caprina"; señaló.
Asimismo, explicó que junto al potencial de las playas en Talara, se sumaría el bosque seco como una actividad ecoturística. “Si ponemos en valor este ecosistema, las oportunidades de desarrollo sostenible en beneficio de las comunidades aumentarán”; reiteró Otivo Meza.