ERP. Otra vez un medio de alcance nacional desnuda la crítica situación que enfrenta la región Piura, la cual tiene muy a pesar de la población, la más alta letalidad por Covid-19. Desde este medio, venimos reiteradamente solicitando la intervención agresiva para contener este tipo de problemas; sin embargo, las autoridades nacionales son facilmente engañados por el Gobernador Regional Servando García Correa para quien todo se encuentra bien.
Y en realidad, los reclamos de Talara, Salitral, Bellavista, Sullana, Santa Rosa, las cosas no están bien y es lo recogido por el programa Panorama, el cual detalla las debilidades de nuestro sistema sanitario y las carencias de muchos establecimientos de salud, cuyo personal no tiene los equipos de protección que necesitan y los pacientes no tienen medicamentos, no tienen oxígeno y menos la posibilidad de ser asistidos por un ventilador mecánico.
En uno de los testimonios dados a conocer por Panorama, se narra las descoordinaciones en el Hospital de Sullana, donde un paciente fue llevado para su atención médica, no lo quisieron recibir y le dijeron que lo lleven a la Unidad Covid que funciona en el estadio Campeones del 36 y tampoco lo admitieron, en ese ir y venir la persona afectada por Covid-19, sucumbió aumentando de esa manera el número de fallecidos en la región Piura.
Informe de Panorama enfoca la dura realidad de hospitales y muertes en Piura
En Piura las autoridades y representantes de organizaciones de Piura, vienen exigiendo una mayor agresividad y responsabilidad para resolver las urgencias de la pandemia, pero no les hacen caso; un nuevo colectivo formado por el sacerdote Martín Chero se ha sumado al reclamo. "Piura quiere vivir" es su expresión, manifestando que quien deba fallecer debería ser cuando le corresponda no por talta de atención médica.
Tanto la Cámara de Comercio de Piura, como el arzobispado de Piura y Tumbes, avalaron un compra de un isotanque de oxígeno debido a la desconfianza con el Gobierno Regional de Piura, hoy dicha acción es utilizada para hacerse publicidad por parte del gobernador García Correa; igualmente dos sacerdotes iniciaron una campaña de solidaridad para conseguir oxígeno y lo lograron, en tanto la Dirección Regional de Salud hace casi nada para hacer un trabajo más coordinado.
En toda esta problemática de alta letalidad para Piura, un ministro del Interior, totalmente desubicado, vino a Piura a dar loas a un gobernador con pocos bríos para esta etapa de la pandemia. Para muchos piuranos y entre ellos varios médicos, el problema es de liderazgo, algo que se ha repetido desde este medio de comunicación y otros que desearían que los piuranos no sucumban ante el Covid-19.