ERP. Más de cinco mil viviendas fueron intervenidas durante la jornada masiva de abatización que desarrolló la dirección de Salud Ambiental de la Dirección Regional de Salud Piura en el casco urbano y asentamientos humanos aledaños de la ciudad de Sechura y cuyo fin es evitar la proliferación del zancudo que transmite el dengue, la chikungunya y el zika.
El director de Salud Ambiental, Miguel Ruíz Gómez, precisó que la actividad se realizó en tres etapas los días 01, 03 y 04 de marzo.
La meta programada fue de 9 mil 257 viviendas. Se logró visitar 9 mil 160 casas. Se inspeccionó 5 mil 413 casas, de las cuales 2 mil 532 se hallaron cerradas. Un mil 076 deshabitadas y 139 viviendas renuentes. Se trataron con abate (larvicida) un total de 3 mil 634 viviendas.
Los lugares intervenidos son: Cercado Sechura, Túpac Amaru, Vicente chunga, Nuevo Chulliyachi, Los Girasoles, Micaela Bastidas, San Martin, La Florida, Nuevo Bazán, Los Jardines, La Perla, Nuevo Horizonte, Nuevo Amanecer, Caleta Constante, Santa Rosa, Villa Canadá, Zona Industrial, Nueva Esperanza, Juan Bautista, Víctor Raúl, Los Pinos, Cristo Rey, Virgen del Carmen, 3 de Enero, 04 de enero, Los rosales, Virgen de las Mercedes y Las Dunas.
Para el desarrollo de la actividad se movilizaron 60 recursos humanos entre biólogos, inspectores, anotadores, abatizadoras, animadoras de la Diresa – Piura, Red Bajo Piura y del centro de salud de Sechura.
Miguel Ruiz dijo que continuaran realizando campañas de abatización para matar las larvas y los huevos del zancudo transmisor (aedes aegypti). Precisó que la fumigación se realiza sólo para eliminar al zancudo adulto (en vuelo) en los lugares donde existe brote de casos de dengue.
Recomendaciones
Así mismo sostuvo que el dengue mata, la chikungunya discapacitada y el zika, en la fase del embarazo, podría generar complicaciones en el bebé como microcefalia.
Por ello la autoridad recomendó a la población no desechar las bolsitas de larvicida (abate), que ayudan a eliminar las larvas y huevos del vector aedes aegypti, pues dura tres meses y no causa ningún daño para la salud de las personas.