ERP. La telenovela de los waikis Dina Boluarte Zegarra y Wilfredo Oscorima Núñez, cada día aportan datos nuevos, el último es un decreto de urgencia atípico, poco común e incluso fuera de contexto que autorizó de manera excepcional a los Gobiernos Regionales suscribir convenios para ejecutar obras en las universidades públicas, cuando ambos son unidades ejecutas y con fines diferentes.
Andrés Vera, en el programa “Conversando” comentó las últimas informaciones sobre el ya famoso Rolexgate, que envuelve al Ayacucho Oscorima, actual gobernador de dicha región y la mandataria Dina Boluarte Zegarra, presidenta de la República, en lo que podría ser la historia romántica de la década. Costos regalos se contraponen a un decreto de urgencia que le permitió a Oscorima contar con 321 millones de soles para su presupuesto.
Es poco común que los gobiernos regionales realicen obras en las universidades públicas, porque ambos son unidades ejecutoras; sin embargo, el gobierno de Dina Boluarte dio un Decreto de Urgencia que condiciona convenios con fines de ejecución de otras. Sin duda, más elementos para que el Ministerio Público se pronuncie respecto a la mandataria, que siendo de izquierda no ha tenido reparos, no solo en vestirse de joyas, sino creerse que es una representante de la derecha peruana.
Como se tiene conocimiento, en la víspera el Ministerio Público realizó la exhibición de los relojes y del brazalete o pulsera que portaba con singular vanidad la mandataria Dina Boluarte; esta situación llevó a observadores a preguntarse de dónde saca tanto dinero la presidenta para adquirir dichos bienes, después de tantos días de mentiras
Después de no tener escapatoria y caer en su propia trampa de mentiras, tuvo que reconocer que no eran de ellas, sino que se las prestaron. Días antes el periodista ayacuchano Adrián Sarria Múñoz, deslizó la historia de los Rolex de Wilfredo Oscorima y las miradas comenzaron a concentrarse en el gobernador ayacuchano, otros medios complementaron la información y la trama fue asumiendo forma.
Pero Adrián Sarria, agrega otros elementos para conocer al actor varón de la trama, Gustavo Oscorima, se dice tiene muchísimo dinero, pero su fortuna no se encuentra determinada y lo que se conoce, está distribuida entre exmujeres e hijos. Las leyendas lo pintan como un hombre de origen modesto, pero con fortuna en la vida. Jaime Antesana, no es tan cándido y cree que su dinero está vinculado al narcotráfico.
Sarria aporta algunos elementos que permiten conocer al personaje, incluso en la etapa negra de su vida que lo llevó a la clandestinidad y ser uno de los más buscados por el país, capturado y enviado a prisión por una sentencia, que finalmente terminó en absolución en la época del magistrado Javier Villa Stein.
Algo que no se puede negar es la relación de afecto y reconocimiento del pueblo de Ayacucho, el cual lo votó durante 3 oportunidades. Aunque ahora le enrostran la palabra Rolex, le expresan más injurias, él se mantiene indiferente a la tribuna y ensaya un discurso indiferente a los reclamos de la masa, aunque parco para los medios de comunicación, en la Plaza pública urde un discurso donde la palabra “obras” se reitera cada cierto tiempo.