11
Lun, Ago

Un llamado urgente a la acción contra la crisis ética y administrativa en la UNP

Piura
Typography
  • Smaller Small Medium Big Bigger
  • Default Helvetica Segoe Georgia Times

ERP. Es evidente que los desafíos que enfrenta la Universidad Nacional de Piura (UNP) son complejos y multifacéticos. El comentario formulado por los candidatos a rector en las elecciones recientes, que resalta una crisis ética, moral y administrativa de larga data, es un punto de partida necesario para abordar la situación con un criterio de unión de fuerzas, consolidación de ideas y acciones inmediatas para terminar con el sistema de corrupción que afecta a la estructura universitaria y a la sociedad en su totalidad. 

Marco E. Nevado, Ph.D.
Egresado de la Primera Promoción de Agronomía, UNP.

Sin embargo, señalo que la crítica debe trascender hacia la formulación de soluciones concretas. Los profesionales egresados de la UNP debemos cambiar la indiferencia y alzar nuestra voz de protesta para convertirnos en agentes activos que eviten la decadencia paulatina de la casa de estudios que nos permitió una profesión. Debemos poner nuestra experiencia al servicio de la institución como lo establece la Ley Universitaria vigente a través de la Asociación de Egresados. Los mismos egresados que  hoy día forman los colegios profesionales, deben actuar proactivamente para convertir a estas instituciones en actores clave en el cambio de rumbo de la universidad.

El rol del colegio profesional va más allá de la defensa gremial, abarcando la promoción de la ética, la calidad y la actualización profesional. Deben actuar como puentes entre la academia, el sector público y el privado, participando activamente en la formulación de políticas públicas, ofreciendo capacitación especializada y contribuyendo con su experiencia en la solución de problemas locales, uno de estos es la UNP.  Su capacidad para fiscalizar y promover el buen ejercicio de sus profesiones los convierte en garantes de la calidad técnica y moral para contribuir en el desarrollo y mejoramiento académico,  actualización de infraestructuras, creación de proyectos sociales y económicos, fortaleciendo así la confianza ciudadana en la UNP y en el progreso sostenible de la región.

Frente a una crisis como la que atraviesa la Universidad Nacional de Piura (UNP), la actitud de las autoridades, tanto políticas como civiles, debe ser proactiva y orientada a la colaboración, pero también firme en la exigencia de transparencia y rendición de cuentas. No se trata solo de señalar los problemas, sino de asumir la responsabilidad que les corresponde como representantes de la sociedad y del estado.

Desde el ámbito político, las autoridades del Gobierno Regional, los congresistas electos por Piura y los concejales provinciales y distritales deben utilizar sus facultades de fiscalización para supervisar la gestión de la UNP conforme a las leyes y al progreso institucional. Esto implica solicitar informes, auditar el uso de los recursos públicos y verificar que las decisiones administrativas se tomen con ética y en beneficio de la comunidad universitaria.

Las autoridades políticas tienen la capacidad de facilitar la conexión entre la UNP y otras instituciones como el Consejo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación Tecnológica (CONCYTEC), el Ministerio de Educación (Minedu), los Ministerios relacionados a las diferentes Facultades de la UNP  y con agencias de cooperación internacional. Esto puede abrir puertas a nuevas fuentes de financiamiento para la investigación y la capacitación docente a través de convenios con universidades extranjeras  de reconocido prestigio académico e investigación  en países como USA, Alemania, Inglaterra, Japón, entre otros. Estos convenios pueden facilitar el intercambio de docentes, la realización de proyectos de investigación conjuntos y el desarrollo de programas de obtención de grados académicos.

Desde la sociedad civil, los colegios profesionales, las cámaras de comercio, las organizaciones empresariales y la sociedad civil organizada deben exigir una rendición de cuentas clara. Su voz tiene el peso de representar a los futuros empleadores de los egresados y a los beneficiarios de la investigación, por lo que su apoyo y presión puede ser un motor de cambio.

La actitud de las autoridades, en Piura, debe ser la de promotores del cambio y fiscalizadores responsables. Deben crear un entorno favorable para que la UNP pueda sanearse internamente, ofreciendo su apoyo y sus recursos, pero también exigiendo resultados concretos. Al hacerlo, no solo cumplen con su deber, sino que también contribuyen a la recuperación de una institución vital para el desarrollo de la Región Piura.

Diario El Regional de Piura
 

Publicidad Aral1

Paypal1