ERP. Un discurso cansino y de sueño, dio la mandataria Dina Boluarte Zegarra, quien cumpliendo con la Constitución Política del Perú se dirigió al país a través del mensaje a la Nación en el Congreso de la República. Fueron 5 horas de lectura, sin ningún contenido retórico, lo que llevó al canciller Javier González-Olaechea Franco a quedarse plácidamente dormido, haciendo el ridículo en evento seguido por todo el país.
Fueron 5 horas utilizadas por la mandataria Boluarte Zegarra, quizá uno de los discursos mas extensos que haya realizado un presidente de la República. La mandataria, más allá de la insignificancia del contenido de su mensaje, abundó en datos pequeños e innecesariamente repetidos, que poco a poco fueron cansando a una audiencia que llegó al hemiciclo antes de las 11 de la mañana.
Sin embargo, si bien es cierto que todas las cámaras centraron como objetivo al canciller de la República; también es verdad que otros fueron vistos en estado somnoliento; otros trataban de mantenerse en vigilia y evitar entrar en estado onírico. El canciller fue invitado por una colaboradora suya a retirarse de la sala y evitar de esa manera, que todas las videocámaras den cuenta de su pérdida de vigilia.
Pese a ello, en las redes sociales, de inmediato se hizo viral lo sucedido a uno de los ministros más influyentes de la era de Dina Boluarte Zegarra, la misma que como ha expresado The Economist se mantiene porque no gobierna, pues los que lo hacen son quienes están en el Congreso de la República.
