ERP. Con la finalidad de conocer de manera detallada y por versión de cada una de las partes de lo sucedido en Perú, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), realiza diversas jornadas de trabajo, entre ellas la reunión con el Poder Ejecutivo. Como se tiene conocimiento, consecuencia de la represión de este gobierno, se tiene un saldo superior de 40 personas asesinadas.
El responsable político en una primera instancia fue Pedro Angulo, quien asumió la presidencia del Consejo de Ministros y Alberto Otárola, quien en las primeras matanzas se desempeñó como ministro de Defensa, en tanto en los nuevos asesinatos ocurridos en Puno, cumple la función de Premier en reemplazo del primero que renunció al cargo.
Pese a su responsabilidad, Dina Boluarte sigue ajena a lo que sucede en el país y defendiendo una sucesión presidencial que fue consecuencia de una sistémica campaña para defenestrar a Pedro Castillo Terrones. Un error le costó ser tildado de golpista y apresado de inmediato. Pese a estas circunstancias existe un sentimiento hostil para los que ahora gobiernan, quienes se sustentan en el apoyo de la derecha y extrema derecha peruana.
“El Gobierno les dará todas las facilidades para saber lo que ha pasado, como se la dimos a los comisionados que visitaron el país en diciembre”, refirió la mandataria, quien estuvo acompañada en el encuentro por la canciller Ana Cecilia Gervasi y el ministro de Justicia y Derechos Humanos, José Tello.
Durante la reunión, que se prolongó por cerca de tres horas, la presidenta Boluarte informó a los comisionados que las medidas dispuestas por el Gobierno, ante las recientes manifestaciones, tuvieron como propósito resguardar a los peruanos y peruanas, la infraestructura pública y los aeropuertos en las regiones.
Asimismo, la presidenta Boluarte ratificó que seguirá promoviendo la paz social y el diálogo con todos los sectores del país.
“Nuestro objetivo es buscar el diálogo, con el Gabinete queremos trabajar atendiendo los grandes problemas que tiene el país, en una lucha frontal contra la corrupción,”, aseveró.
La delegación de la CIDH, integrada entre otros por los comisionados Stuardo Ralón y Joel Hernández, realiza una segunda visita de trabajo en el país, por invitación del Gobierno peruano.
Pese a sus palabras, existe un gran descontento nacional, que pretende aplacarse con la fuerza del fusil y la pistola. El Perú, vive momentos dramáticos, superando incluso a los gobiernos de Ollanta Humala, Alan García y otros y solo comparable con las muertes ocurridas durante el gobierno de Fujimori. La población pide la renuncia inmediata de Dina Boluarte, la elección de una mesa directiva del Congreso realmente transitoria, nueva constituyente y nuevas elecciones generales.