ERP. Todo hace indicar que la aparente calma que lograron jefes policiales anteriores, ha terminado. Los asaltos y robos se producen a diario y sin ningún tipo de contemplación; es lo que pasó este lunes en la madrugada cuando 10 delincuentes a bordo de 5 motocicletas irrumpieron en un grifo local, para llevarse el dinero y luego fugar con toda tranquilidad, sabedores que lo último que existe es seguridad.
El atraco se produjo al promediar la 1:45 de la mañana en el grifo “Gechisa” ubicado en la carretera Sullana a Piura, frente de las instalaciones del local de maestranza de la municipalidad provincial y donde funcionan otros establecimientos importantes de esta localidad. Los delincuentes llegaron de manera sorpresiva cubiertos con pasamontañas, redujeron a los despachadores de combustible y además a dos vigilantes que prestan servicios en el grifo mencionado; después se dirigieron a la oficina para apropiarse de 120 mil soles correspondiente a las ventas de los 3 días anteriores.
Con la finalidad de no dejar huellas, los facinerosos se llevaron el sistema de grabación del grifo, lo que indica que tenían el conocimiento suficiente para saber el lugar de ubicación de estos equipos. Un vigilante, que pretendió oponerse al acto delictivo, fue agredido en la cabeza dejándolo herido. Hasta la escena llegaron policías de investigación criminal de la ciudad de Piura para recoger algunas evidencias que puedan servirles como pistas para dar con el paradero de los delincuentes; aunque es probable que la identificación sea bastante difícil por la forma como llegaron y además por el robo del sistema de videovigilancia.
Según el gerente de la empresa Gilberto Riofrío Almestar, el dinero robado iba a ser depositado este lunes, aunque no descartó que haya infidencia, por la forma y modalidad del atraco que fue directamente al lugar donde se guardaba el dinero. Frente al hecho, solicitó que la Policía Nacional del Perú extreme sus medidas de seguridad e inteligencia para evitar este tipo de acciones. Como hemos informado, durante los últimos tiempos los asaltos y robos en Sullana habían disminuido; sin embargo, el caos, desorden, están incrementando los niveles de inseguridad de los sullaneros.