ERP. Más de 700 familias de la urbanización Bello Horizonte, son perjudicadas por el desabastecimiento de agua potable desde hace casi 4 años. El problema empezó el 17 de diciembre del 2020 cuando colapsó el pozo de agua potable que abastecía Bello Horizonte y urbanizaciones aledañas. El pozo quedó inutilizable debido a que el agua que succionaba superaba altamente los límites de salinidad, convirtiéndola en un agua no apta para el consumo humano. La EPS GRAU intentó reparar el pozo, pero no lo logró y le dio de baja.
“Hemos pasado toda la pandemia, el fenómeno del niño, el ciclón Yaku y la epidemia de dengue, sin nada de agua potable. Desde fines del 2020, la mayoría de familias nos abastecemos con las cisternas de agua potable que nos envía OTASS de manera intermitente y con un agua que desconocemos su procedencia y calidad” indicó Martín Lescano, secretario general de la Juveco Bello Horizonte. Agregó que esto causa una gran afectación a la salud y economía de las familias que incluso tienen que comprar agua cuando las cisternas no llegan y porque el agua que distribuyen no sirve para preparar los alimentos porque es turbia.
La mayoría de las familias ha tenido que comprar mangas para conectarse a las cisternas de agua, a cuyos conductores se les espera y se les ruega para que ingresen a los pasajes. Pese a esta problemática la EPS Grau realiza cobros excesivos. “La tarifa que me cobran supera los 160 soles por un servicio que no tengo, totalmente deficiente y cuando en mi familia somos 5 integrantes” indicó el vecino Enrique Olmos, quien pidió la intervención de SUNASS.
La juveco Bello Horizonte ha solicitado al gobierno regional de Piura el financiamiento para la perforación de un nuevo pozo de agua potable en el sector. Los vecinos alistan una gran marcha de protesta para exigir que las autoridades competentes hagan su trabajo y den solución a este problema.