ERP. Luego que la Municipalidad Provincial de Talara lograra reubicarlos, por varios meses, en el ex local de Serpetro, un área de terreno en el populoso Cono Sur, donde a futuro se construiría un moderno centro de abastos.
El ordenamiento de los exteriores del Mercadillo de Talara Alta (Calle 4 y Calle Z) ha sido "flor de unos meses" pues nuevamente los comerciantes informales tomaron la vía pública para vender frutas, verduras y otros productos.
Según aducen los comerciantes han sido abandonados por las autoridades municipales las cuales no les brindan las garantías y facilidades para realizar sus faenas comerciales, lo que al final les genera pérdidas económicas. En tanto, el retorno de los comerciantes generó malestar entre los vecinos al ocupar las veredas diseñadas para la libre transpirabilidad de los peatones.
Como se sabe, este jueves se produjeron varios altercados entre vecinos y ambulantes porque las veredas se convirtieron en intransitables. Lo cierto es que lamentablemente es muy complicado conseguir el ordenamiento pues los comerciantes ambulantes siempre retornan.
Igual sucede en el centro de Talara. Los principales puntos donde la informalidad viene ganando espacios es en las Avenidas D y E de esta ciudad, además en horas de la tarde y parte de la noche se observa gran cantidad de ambulantes en el Centro Cívico la venta de artículos diversos está a la orden del día.
Lo cierto es que los ambulantes siguen tomando el control de las principales arterias del centro de la ciudad a tal punto que hay sectores por los cuales los peatones no pueden transitar libremente. Los transeúntes conminan a las autoridades locales que dispongan un plan de control del comercio ambulatorio en el centro histórico de la ciudad.