Lima. Las mujeres emprendedoras se caracterizan por su responsabilidad en el pago de sus créditos productivos y son mejores pagadoras, pues priorizan la estabilidad y el futuro de sus familias, afirmó el gerente general de Financiera Confianza, Martín Naranjo.
Indicó que el 51 por ciento de los clientes de esta entidad son mujeres emprendedoras, quienes priorizan esta inversión para el bien de sus familias, con lo cual, “tienen claridad respecto de sus prioridades de cumplimiento”.
“Aquí y en otros países, las mujeres pagan mejor. No tiene que ver solo con nuestra cultura; es en todo el mundo, una cuestión de género, porque una de las características más importantes que se tienen al ver el mundo femenino es que ellas ven los créditos productivos como una inversión de largo plazo que beneficiará a sus familias”, dijo.
Tras expresar su sincero y afectuoso saludo a todas las mujeres peruanas por su día, especialmente a las que lideran un emprendimiento, Naranjo reiteró que, debido a la misión de la entidad, su público objetivo se ubica en la base de la pirámide; es decir, son principalmente personas vulnerables o pobres.
“Si quieres atender a la población ubicada en la base de la pirámide, atender los temas de pobreza, vas a ver que en el Perú, y en otras economías, la pobreza tiene pues rostro femenino y rural. Que la mayoría de nuestros clientes sean mujeres, es una consecuencia natural del foco de nuestra actividad”, destacó.
Durante 2014, Financiera Confianza atendió a 207,019 clientes vigentes del activo, de los cuales el 87 por ciento son personas vulnerables.
De ese total, el 51 por ciento son mujeres, el 39 por ciento personas jóvenes (menores de 35 años), y el 23 por ciento proviene de zonas rurales del país.
En cuanto a los clientes nuevos atendidos en 2014, prestó sus servicios a 87,570 emprendedores de todo el país, de los cuales el 92 por ciento está en condición de pobreza o vulnerabilidad monetaria, el 52 por ciento son mujeres y el 53 por ciento son personas jóvenes (menores de 35 años).
Asimismo, desarrolla el programa “Palabra de Mujer”, orientado a las mujeres emprendedoras de menores recursos de áreas rurales y urbanas, quienes reunidas en un grupo de apoyo mutuo acceden a un crédito con educación.
Para ayudarlas se utiliza una metodología de grupos de confianza, de apoyo mutuo, de entre 8 y 25 mujeres con créditos sucesivos en ciclos y capacitación en desarrollo humano y gestión empresarial.
Durante 2014, la entidad atendió a 48 mil mujeres con este programa, cifra que en los últimos tres años suma 132 mil mujeres emprendedoras beneficiadas.(Andina)
