ERP. La situación de Arturo Ignacio Ríos Ibáñez, presidente de la Federació Peruana del Perú en reemplazo de Agustín Lozano, comienza a oscurecerse, pues formaría parte de la red criminal que lideraría Agustín Lozano Saavedra, actualmente con detención preliminar. Aunque ha negado esa posibilidad, estuvo bastante involucrado en gestiones como la ingrata gestión para que Ricardo Gareca siga cmo director técnico de la rojiblanca.
En efecto, en aquella oportunidad Agustín Lozano, encargó a Ríos Ibáñez se encargue de contactar con Ricardo Gareca para que continúe como Director Técnico. Viajó hacia la Argentina, pero se desprende que no hubo la voluntad de continuidad. Además, el indicado dirigente, era bizoño en ese tipo de actividades considerando que no tenía demasiado experticia como dirigente deportivo.
Según el Ministerio Público, Ríos Ibañez, participó en cuatro hechos criminales como parte de ‘Los Galácticos del Fútbol’, según el fiscal Juan Orihuela. Solo Lozano y Ríos firmaron un acta dando visto bueno a la contratación de la empresa 1190 Sports para negociar la transmisión de los partidos. Justamente, uno de los temas que acarrearían la responsabilidad de la organización de Lozano Saavedra.
Según informó la República, menos de 48 horas después de la detención del presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), Agustín Lozano Saavedra, el vicepresidente de la institución, Arturo Ríos Ibáñez, anunció que tomaría su lugar hasta el esclarecimiento de la situación legal del dirigente deportivo. Ríos lo dijo como si se tratara de un caso ajeno e incidental, cuando en realidad aparece señalado como uno de los 21 componentes de la organización criminal ‘Los Galácticos del Fútbol’ que encabezaba Lozano.
Arturo Ríos Ibáñez, al asumir la conducción de la FPF, declaró: “Voy a pedir a todos los que están investigados, o que sepan que pueden ser investigados, que se presenten a la Fiscalía. Es el momento”. Pero el propio Ibáñez está comprendido en el caso que investiga el fiscal especializado en crimen organizado Juan Orihuela, y lo señala como partícipe en varios de los 14 presuntos actos de corrupción, especialmente en el más grave: la adjudicación a la empresa chilena 1190 Sports para que negocie los derechos de transmisión por televisión de los partidos locales.
El fiscal Orihuela indica en la acusación que Ibáñez sabía que el directivo de la FPF Joel Raffo Olcese es primo del representante de la firma Prisma, Diego Delgado Raffo. Agustín Lozano, Arturo Ibáñez y la directiva aprobaron la contratación de Prisma para que propusiera a una compañía para cederle los derechos de transmisión. Prisma ofreció a 1190 Sports, empresa a la que finalmente Lozano, Ríos y la directiva otorgaron el millonario contrato.
“El hecho de que me involucren no supone que soy culpable. Yo no soy ningún delincuente. Mi abogado está ofreciendo los criterios correspondientes y cumpliré con todas las disposiciones del Ministerio Público y el Poder Judicial”, declaró Arturo Ibáñez a La República. De acuerdo con la imputación de la Fiscalía, Ibáñez no es un personaje episódico, aislado, anecdótico en el mecanismo armado por Agustín Lozano para perpetrar los crímenes que le atribuyen las autoridades. Actuó como pieza clave.
Estos son los hechos en los que intervino Arturo Ibáñez, conforme al fiscal Orihuela:
a) La cesión de los derechos de transmisión de los encuentros futbolísticos de la Liga 1 a la firma 1190 Sports.
b) La modificación del reglamento para sancionar a los clubes futbolísticos opositores al acuerdo con 1190 Sports.
c) Los aportes de dinero a las Ligas 1, Liga 2 y Ligas Departamentales que apoyaban la actuación de la directiva liderada por Agustín Lozano.
d) El viaje a Qatar pagado con fondos de la FPF en beneficio de personas que no tenían vínculos con las actividades deportivas.
Arturo Ríos no formó parte de la lista de miembros de la red involucrados y que tienen actualmente detención preliminar; sin embargo, no enerva que no se encuentre como investigado, lo que podría acarrearle responsabilidades futuras; Lozano y otros, actualmente cumplen detención preliminar y es probable que luego vayan a prisión preventiva, considerando la gravedad de los hechos. .