ERP. En el humilde hogar de la familia Bayona Agurto, ubicado en la calle Simón Bolívar N° 203, el dolor y el desconsuelo de haber perdido al progenitor Juan Enrique Bayona Reyes (49), los embargaba. Sus restos yacían velándose, luego del lamentable accidente trágico que ha enlutado a familias sullaneras.
Familiares no asimilan su deceso y aún no entienden cómo ocurrió la desgracia. Como de rutina, Bayona Reyes salió a trabajar, sin embargo, la desgracia lo atrapó en el trayecto. Fue su hijo Luis Alberto quien recibió la triste noticia, a través de una llamada telefónica de este trágico suceso, por parte de los responsables de la empresa.
Embargados por el llanto decidieron viajar hasta Pacasmayo, donde lograron traer los restos mortales de su padre. Los dolidos aducen que sólo el Soat del bus ha corrido con los gatos del ataúd y traslado del féretro, sin embargo, hasta el cierre de esta nota, los dueños de la empresa aún no hacían llegar las ayudas necesarias.
Igual panorama se observaba en la vivienda de la familia Saavedra Pardo, donde aún esperaban la llegada de los restos de José Wilmer Saavedra Panta. Lágrimas de tristeza y mucho dolor se vio en el rostro de su madre Norma Pardo Pulache.
Ambas muertes han sorprendido a sus familias que lloran desconsoladamente estas trágicas muertes, dado que estas personas eran muy queridas en la zona. José Wilmer Saavedra deja en la orfandad a una niña de dos años y vivía en la calle Santa Úrsula N° 816 de la Urbanización Santa Rosa de Sullana.