ERP. En su primer día de clases en la Universidad del Pacífico, en Lima, Jean Lou Castro Cárdenas, talento de Beca 18 que iniciaba sus estudios de Negocios Internacionales, no encontró su salón. Era el año 2016, y este empeñoso muchacho, entonces un tímido adolescente de 17 años, recorrió pasillos, subió y bajó escaleras, repasó una a una las aulas, pero ninguna resultó ser la suya.
“A pesar de ser un campus no muy grande, me perdí. Ahora suena gracioso, pero estaba muy preocupado y deseaba que alguien me ayude”, recuerda Jean Lou, quien a raíz de esta experiencia se propuso trabajar para que ningún otro cachimbo atraviese una situación similar.
Así llegó al Grupo de Estudiantes Comprometidos con el Apoyo para la Integración (ECAI-UP), integrado por alumnos voluntarios que orientan y asesoran a los ingresantes para adaptarse a la vida universitaria. Jean Lou aún no lo sabía, pero fue aquella labor, desinteresada y al servicio de los demás, la que lo preparó para convertirse en uno de los 19 mil voluntarios que actualmente asisten al público y los atletas de los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Lima 2019.
“En casa me inculcaron que es importante ayudar a los demás, darle una mano a quien lo necesita, así no sea un amigo o un conocido. Con ECAI-UP, por ejemplo, hemos podido orientar a más de 200 estudiantes, y ahora en Lima 2019 me siento muy contento y útil como apoyo operativo en las competencias de natación que se desarrollan en el Centro Acuático de la Villa Deportiva Nacional. Siento que soy parte de algo grande, que definitivamente dejará en alto el nombre del Perú”, asegura.
Nacido en el distrito de Comas, donde aún vive junto a su mamá y tres de sus cuatro hermanos, Jean Lou terminó el colegio como uno de los mejores de su promoción. Convencido de su vocación por los negocios, postuló hasta en tres ocasiones a dos universidades, quedando fuera de la lista de admitidos por un escaso margen. Apoyado por su familia, la cual jamás dejó de creer en su talento y potencial, Jean Lou no desistió de su propósito y redobló su preparación para obtener una beca en el concurso Beca 18-2016, convocado por el Programa Nacional de Becas y Crédito Educativo (Pronabec) del Ministerio de Educación.
“A la larga gané el mejor escenario posible: gracias a Beca 18, hoy puedo dedicarme por completo a mi carrera, sin preocupar a mi familia por la inversión que demanda una formación universitaria, y también tengo tiempo para apoyar a otros como voluntario. Además, la experiencia con Lima 2019, viendo a deportistas de tantos países entregarse enteros a sus sueños, me reafirma que todo el esfuerzo que uno le pone a sus objetivos, las ganas y el sacrificio – porque hay que dejar de lado muchas cosas – siempre traen una recompensa”, comenta.
Por estos días, cada vez que regresa a casa, los hermanos de Jean Lou lo interrogan para que les cuente las anécdotas y entretelones de los entrenamientos y competencias. Entre risas, este joven talento les comenta algunas incidencias, “pero sin fotos, pues es una reserva necesaria para la seguridad del evento”, les recalca.
A su regreso a las aulas universitarias, para iniciar el sétimo ciclo de su carrera, Jean Lou habrá sumado una nueva experiencia a su creciente trayectoria como voluntario: la de haber realizado una labor impecable como embajador del país ante la élite deportiva del mundo.