ERP. Pedro Pablo Kuczynski fue obligado a renunciar por sus presuntos errores cometidos e incluso que se encuentran en el nivel de delito. Mitomanía, histrionismo, acusaciones de corrupción por hechos pasados, confiar en un imberbe como Kenji Fujimori para que le consiga votos, haber indultado al ex presidente Alberto Fujimori, confiarse en las posibilidades de kenjistas sin entender lo realmente sucedido con Keiko Fujimori.
El 23 de marzo la historia abre una nueva página. Martín Vizcarra Cornejo, un presidente regional que gobernó una región pequeñísima como Moquegua, se convierte de vicepresidente de la República a Presidente Constitucional en reemplazo de Pedro Pablo Kuczynski. El Congreso de la República tras su pronunciamiento decidirá entregarle el mando, tras los gritos de “qué se vayan todos” en alusión a los parlamentarios.
Pedro Pablo Kuczynski, terminó embaucado con la compra de votos
La segunda moción de vacancia fue el resultado de nuevas pruebas que lo descalificaban como presidente de la República y la acción consensuada de otras fuerzas que anteriormente lo salvaron. Se unieron una vez más el Frente Amplio y Nuevo Perú, se sumó Alianza para el Progreso y sobre todo los parlamentarios que quedaron dolidos por la actitud anterior de Kenji Fujimori.
Pedro Pablo Kuczynski pretendió hacer lo que antes le dio resultado e inició la tarea de conseguir votos a su favor para evitar la segunda vacancia. Paralelo, inició al mismo estilo de Fujimori, un desplazamiento por diversos lugares del país, donde gritaba a viva voz que lo ¡Dejen trabajar! Y le echaba la culpa a los miembros del Congreso de la República que querían vacarlo.
Se negó en varias oportunidades a declarar a la Comisión Lava Jato y esclarecer los hechos oscuros que lo envuelven. Lo cierto, que existen evidencias que Pedro Pablo Kuczynski, cuando fue ministro no tuvo ninguna contemplación para evitar hacer negocios con empresas que tenía contratos con el Estado. Es tal incluso su auto convencimiento, que sigue creyendo que todo ello es normal, cuando estaba prohibido por Ley.
Con una mayor cantidad de pruebas, los parlamentarios se siguieron sumando por la vacancia y PPK siguió confiado buscando por interpósita persona persuadir, manipular o comprar los votos que lo salven de la vacancia. Encargó de esta tarea a algunos ministros poco capacitados para este tipo de tareas y sobre todo a un cándido Kenji Fujimori, quien si bien es cierto lo salvó en la oportunidad anterior, en esta demostró su total impericia.
El trato entre PPK y Kenji, fue inusualmente acomodaticio. Es probable que confiará demasiado en Kenji y Alberto Fujimori y sus posibilidades de dividir a Fuerza Popular; y es probable que no entienda el verdadero sentir de Keiko Fujimori y las huestes de Fuerza Popular que se quedaron frustrados en la primera moción de vacancia.
Sin duda que en Fuerza Popular, existen muchos políticos que no tienen demasiada filia al ex presidente Fujimori, y saben además, que en futuras contiendas no tendrán más oportunidad que las que tengan con Fuerza Popular. Demasiada creencia en las capacidades de Fujimori, en su liderazgo y no se valoró adecuadamente que Fujimori es un anciano que solo puede tener capacidad para sentir el cariño de sus nietos.
Se usó métodos totalmente vedados y en este sentido, comenzaron desde la presencia del Ministro de Justicia el cual facilitó y mal, la libertad de Alberto Fujimori. Designación de un anciano en la Comisión de Gracias Presidenciales, justo cuando el país festejaba el resultado del partido de fútbol con Argentina; indulto antes de nochebuena, desplazamientos con gran pompa inaugurando obras, mensajes de confrontación, compra de parlamentarios, todo ello lo hizo caer en torpeza tras torpeza.
La situación de torpezas de ministros, de sus operadores y del mismo PPK, lo llevó al final a presentar su renuncia, tan solo 601 días después de haberlo asumido y ceder el cargo por el resto del periodo a Martín Vizcarra Cornejo. Por lo observado el relevo es totalmente constitucional y no existen razones para creer que existe un quebrantamiento legal.
Retornado al tema que se “vayan todos” evidentemente que no existe base legal para hacer realidad ese pedido; pero al margen de ello, el tema de la calidad de los parlamentarios se explica primero por la estructura de los partidos políticos y por las debilidades del electorado en materia de capacidades democráticas. Pueden darse nuevas elecciones; sin embargo, se repetirá los males de siempre, en tanto no haya cambios sustantivos en el mediano plazo.
Errores de PPK
— Andrés Vera Córdova (@andresveracordo) 21 de marzo de 2018
1. Mentir sobre negocios
2. No entender sobre lealtades
3. Dar prioridad al burocratismo
4. Desatender la parte política
5. Confíar en fujimoristas
7. Indultar a AFF (Garrafal)
8. Confiar en un imberbe como Kenji
8. Menospreciar a Keikistas
9. Gestión ineficiente pic.twitter.com/O4tD9JIB0D