ERP. Los vecinos del 9 de Octubre ubicados en la parte alta de esta ciudad, no saben qué hacer ante la proliferación de bares y cantinas que se han instalado en la zona, poniendo en peligro sus vidas y la de sus menores hijos, al registrarse enfrentamientos con armas de fuego, asaltos y hasta actos contra el pudor, sin que las autoridades de esta localidad tomen cartas en el asunto a fin de que estos antros de mala muerte, no tan solo sean multados sino clausurados de manera definitivamente al poner el riesgo la salud pública.
El ciudadano D.Z.E. de 45 años, es uno de los vecinos de la zona que ha denunciado a través de nuestro medio que todos los jueves por la tarde hasta la madrugada del martes, los bares, cantinas y discotecas, funcionan acogiendo a féminas de distintas nacionalidades y personajes de mal vivir, sin que las autoridades policiales, subprefectura y de la municipalidad provincial hagan algo al respecto.
El vecino octubrino, refirió que los dueños y administradores de los antros no respetan la tranquilidad del vecindario y desarrollan sus actividades con alto volumen hasta el amanecer, registrándose durante la madrugada actos que atentan contra la salud pública, lo que generado que la zona sea intransitable para los mismos vecinos, que pese a las constantes denuncias hechas ante las autoridades, poco o nada han hecho para revertir esta grave situación, al contrario, aseguran que son amenazados por sujetos foráneos cuando realizan sus reclamos ante los administradores o dueños.
Contó que al promediar las 5:00 a.m del último domingo, dos grupos se agarraron a tiros de bala en los exteriores del bar “La tía Rosa”, generando el pánico entre los moradores al temer que el hecho cause algún daño en sus inmuebles o cobren la vida de algún vecino. Dijo que llamaron a la comisaría de Talara Alta para que hagan algo al respecto, pero estosllegaron cuando todo ya había pasado.
“Acá se han instalado bares, cantinas y discotecas que en su momento fueron clausurados en Talara Alta. Estamos cansados del alto volumen de la música, el grito y lisuras de los parroquianos, de las balaceras y los asaltos. Es increíble que las autoridades hagan caso omiso a nuestro reclamo, al contrario vienen y se llevan su sencillo y nosotros acá seguimos igual. Creo que están esperando a que haya alguna muerte para que recién tomen cartas en el asunto y clausuren estos antros” expresó el indignado vecino.