ERP. Pese a las advertencias hechas por las autoridades de salud, sobre el incremento de pacientes hospitalizados y muertes a consecuencia del contagio del COVID-19 en esta provincia y la región Piura, los bares y cantinas hacen caso omiso a la advertencia y abren de manera clandestina sus puertas para atender a los parroquianos quienes sin respetar el debido distanciamiento social y las medidas de protección y de bioseguridad, consumen alcohol.
El último viernes, personal policial y de la Municipalidad de Talara –Fiscalización y serenazgo-, llevaron a cabo un operativo inopinado a los bares “El encanto”, "El delfín", "Ex brisa marina" y “North fish”, quienes de manera clandestina abrieron sus puertas para su atención, interviniendo un promedio de 50 personas entre hombres y mujeres de distintas nacionalidades, que además de consumir abundante licor no respetaban las normas de bioseguridad dispuestas por el Ministerio de Salud para evitar el contagio del COVID-19.
Cabe indicar que según el reporte de las autoridades, en algunos de los locales antes en mención que desarrollaban actividades comerciales o servicios con giros no aprobados por el Gobierno Nacional, se halló colchones en ambientes donde al parecer se ejercía la prostitución, además de la presencia de algunas menores de edad, por lo que los responsables serán investigados ante una posible trata de personas.