Pariñas/Talara (ERP). Hace dos semanas el Serenazgo realizó operativo contra jóvenes que toman bebidas alcohólicas en espacios públicos, logrando disuadir a una importante cantidad de adolescentes y hasta algunos menores de edad; sin embargo, los padres de familia coinciden que se debe sancionar a las tiendas comerciales que venden las bebidas alcohólicas, para que las ingieran en alamedas, parques, incluyendo el Centro Cívico de Talara.
El pedido de los padres talareños a la Policía y Serenazgo es reiterado, aunque también son los responsables del control de sus hijos. Los vecinos exigen a los comisarios PNP Talara, Talara Alta, Subprefectura y Fiscalía Provincial, para que programen operativos inopinados los fines de semana, como parte de sus planes de prevención de delitos.
Sostienen que si estos operativos se realizaran reiteradamente, se controlaría que los conductores no estén en estado de ebriedad e indocumentados, personas con orden de captura deambulen por la ciudad, menores de edad ebrios, entre otros.
¿Por qué los jóvenes consumen bebidas alcohólicas?
Consultado por este medio sobre el tema, el psicólogo Minsa Talara, Víctor Bossio Rodríguez, precisa que los adolescentes, probablemente sea, el grupo más propenso a adquirir conductas de riesgo; y que estas conductas están en relación con los estilos de vida de los menores, que sumados a la curiosidad, a la experimentación de situaciones nuevas, y a la sensación de ser adultos, son partes naturales del crecimiento.
Para los adolescentes, señala, las bebidas alcohólicas resultan sumamente atractivas, logran muchas sensaciones deseadas como el sentirse seguros, tener valor, relajarse, terminar con la angustia y ansiedad, olvidarse de los problemas o sentir que pertenecen a un grupo, entre otras.
En ese sentido, cuestionó que es común que los mismos padres envíen a su hijo a comprar bebidas alcohólicas y peor aún que los adultos, los bodegueros, o expendedores se las venden.
“Los padres y los profesores deben procurar generar ambientes sanos y óptimos para que los hijos y alumnos puedan desarrollarse armónicamente, en cuerpo y mente. Son los principales responsables que algo les suceda en una ciudad tan insegura como Talara. No se justifica que reclamen seguridad si permiten que sus hijos anden en la calle, hasta altas horas de la noche; e incluso no controlen si beben licor”, acotó el especialista en Salud Mental.
