ERP. Las elecciones generales en Perú, se estarán realizando el 10 de abril del 2016 y el problema recurrente es la presentación de una gran cantidad de planchas presidenciales que se disputan los cargos electivos que se determinarán para un periodo de 5 años. De acuerdo a Ley, para presentarse en una contienda de esta naturaleza, debe realizarse mediante un Partido Político, los cuales son de fácil formación e igual de fácil desintegración.
El alto número de fórmulas presidenciales que competirán en las próximas elecciones debilitan aún más el sistema de partidos y no contribuye a fortalecer la democracia en Perú, advirtió el analista político y experto en gobernabilidad, Luis Nunes.
En un tono crítico, dijo que en estas elecciones buscan participar “partidos de alquiler”, “de subasta” y “aventuras electorales”, sin capacidad ni representación y cuyo único objetivo es “pescar a río revuelto”. En efecto, como se ha manifestado en varias oportunidades, los partidos políticos en la semejanza de otras democracias no existen en el caso peruano y lo que si se observa, con caudillos que para hacer su realidad de su postulación conforman una organización partidaria.
"Representa una fragmentación del ya débil sistema de partidos, y no parece una gran contribución a la democracia", afirmó a la Agencia Andina el especialista Nunes, tras analizar la situación como se enfrentará el próximo proceso electoral.
Vencido el plazo, 19 fórmulas presenciales fueron presentadas oficialmente, pero la inscripción formal ante el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) se concreta las primeras semanas de enero, conforme a la ley electoral. En ese sentido, Nunes dijo que en esta coyuntura es indispensable incentivar entre los electores el voto informado, para que conozcan la trayectoria de cada candidato y, sobre todo, sus propuestas de gobierno.
Regiones a la plancha
Por otro lado, Nunes saludó el interés mostrado por los principales candidatos presidenciales de incluir en sus planchas a exgobernadores regionales, algo que no se había dado en anteriores elecciones.
Al respecto, refirió que esto es positivo para el proceso de descentralización, porque coloca a sus actores en puestos expectantes de la política nacional y desde ahí se pueden canalizar políticas a favor de la profesionalización de las regiones, un mejor gasto público y una coordinación más fluida con el Ejecutivo.
En términos prácticos, el especialista en gobernabilidad señaló que los partidos nacionales son conscientes que no tienen arraigo regional y por eso recurren a estas personalidades o movimientos regionales, que sí lo tienen.
Anotó que hasta ahora los partidos eran recelosos de los movimientos regionales, pues los veían como una competencia, pero ahora se han convertido en socios políticos.
Señaló que esta asociación tiene doble cara: por un lado, el partido se beneficia del arraigo del candidato en su región, y eso se traduce en votos; pero también puede ser que el partido desconozca algunas denuncias, que sí están muy presentes en las regiones, y sea por el contrario un pasivo de la campaña en ese lugar.
Ejemplos de partidos sin importancia actual
Varios ejemplos de partidos formados y sin mayor perspectiva de sostenibilidad, son Perú Posible fundado por Alejandro Toledo; después que ganó las elecciones no se consolidó y en las próximas contiendas el porcentaje obtenido difería en relación al que obtuvo como ganó. Lo mismo sucede aparentemente con el Partido Nacionalista Peruano, el cual encumbró a Ollanta Humala Tasso, actualmente su posibilidades son mínimas para salvar la inscripción en el Registro de Organizaciones Políticas y mucho más para ganar las elecciones.
Con información de Andina