ERP. La vida es finita nadie lo niega y se confirma siempre; sin embargo, muchas veces se adelanta para dejar una estela de dolor y tristeza en todos quienes conocieron a esa persona y de reconocimiento por la labor realizada. El artista plástico Terangi Sáenz Barreto (68), partió hacia el infinito, dejando como legado una significativa obra que lo hará permanecer en la imaginaria regional.
Expresaba en sus diversas creaciones su sensibilidad propia de los artistas plásticos que extreman la percepción de cada momento de la vida humana, igualmente, consecuencia de su formación su técnica permitió lograr pinturas admirables que fueron exhibidas en cada presentación regional y nacional. Terangi fue admirado y reconocido.
Sus fuentes de conocimiento fueron el colegio Carlos Augusto Salaverry, ejerció la docencia donde trató de extender el amor y la práctica por la pintura; varios de ellos siguen sus pasos, otros lo recuerdan como suma extrañeza. Recorrió su arte por diferentes ciudades de Europa, donde pudo exhibir sus creaciones. Estudió en la Escuela de Bellas Artes de Piura donde perfeccionó su arte.
Terangi ha partido físicamente, pero se mantendrá vigente con sus pinturas, su técnica, su particularidad y ese incansable recorrido por sembrar cultura, por transmitir desde lo profundo de su percepción, obras de arte que dignifican a la provincia de Sullana, su tierra natal y de la región Piura en general.
Su obra fue monumental, su creatividad inagotable, lo hizo primero con ese don nacido y despúes perfeccionado por sus estudios académicos, entre sus producciones se puede mencionar "Mujer acostada", "Mestizaje", "Nacimiento del nuevo mestizo", "Amor mestizo" y tantos otros que exhibió en su natal Sullana, en Piura, Trujillo, y el exterior.
Se formó como gestor cultural en la Escuela Mayor de Gestión Municipal, en un programa financiado por la Agencia de Cooperación Española, en este proceso pudo interactuar con otros personajes quienes expresaron al conocer esta noticia, su pesar por su partida.
