Una columna para ca… lentarse de la risa
Por: Nelson Peñaherrera Castillo. Ella: Ohhh, abuelo, qué romántica está la luna llena aquí en el campo. (Suena una lechuza no tan lejos.) Él: Pe-pe-pe-pero, abuelo, ¿no cre-cre-creees que está haciendo mucho frío aquí? (Un lobo aúlla a lo lejos.) El abuelo: No tienen nada de románticas estas noches de luna llena, m’ijita. Ella: Ay, abuelo, no seas aguado; ¿por qué? El abuelo (tono lúgubre): Porque cuentan los antiguos que sus antiguos les contaron que hay algo más terrorífico que una noche de luna llena en el campo.