ERP. Las celebraciones y fiestas de fin de año, sumadas a los eventos de graduaciones y clausuras escolares y el inicio de la temporada vacacional, marcan un incremento significativo en el presupuesto personal y familiar en el mes de diciembre; esto sumado al incremento de precios obliga a muchas personas a endeudarse, y obliga a adoptar nuevas decisiones para amenguar el gasto que tiene que realizarse.
Navidad y también el Año Nuevo, son celebraciones muy arraigadas en las costumbres de todos los peruanos y del mundo en general. En Navidad, se rinde tributo a una de las fiestas religiosas de más arraigo en el mundo; en tanto, que en Año Nuevo, es dejar lo pasado, esperando que el siguiente signifique nuevas oportunidades y logros positivos.
Las tiendas comerciales, son los lugares preferidos de visitas de la población; al mismo tiempo otorgan un visión totalmente renovada y los criterios de marketing buscan convencer mucho más a un potencial comprador; las ofertas van desde juguetes que cada año se actualizan, en tanto la línea blanca y de tecnología se expanden con precios aparentemente promocionales. El color rojo y blanco de Navidad, es la característica principal para estas celebraciones.
Para hacer más atractiva estas festividades, los grandes centros comerciales, donde se concentran una diversidad de empresas, se distribuyen por todo el país, con la más completa oferta.
Muchos buscan las opciones más fáciles y es el uso de las tarjetas de crédito, las mismas que aprovechan esta oportunidad para incrementar sus ofertas. Sin embargo, todo crecimiento del consumo vía este medio, significa crear un costo futuro que debe evitarse para controlar lo que tiene que pagarse; sin embargo, para muchos vale el buen gesto a favor de los niños y niñas en Navidad y las sorpresas de fin de año.
“Una buena manera de generar recursos económicos en esta época es recurrir a la venta de los artículos que no se utilizan y que ocupan innecesariamente un espacio en el hogar”, indicó Jaime Macaya, gerente de expansión en Latinoamérica de OLX.
Según Jaime Macaya, la tendencia de vender artículos usados está creciendo firmemente en el país. De hecho, OLX cuenta ya con más de 900,000 clasificados publicados en su plataforma en Perú. Esto acompaña una tendencia global, ya que OLX registra más de 250 millones de usuarios en todo el mundo.
Justamente, existen frente a este tipo de acciones, alternativas para desprenderse de lo que ya no tiene utilidad y que se puede vender a través de la plataforma OLX. Veamos las siguientes opciones:
¿Qué se puede vender?
Esta es una buena época para realizar un orden general y revisar armarios y despensas. Si hay un objeto que no se usó en los últimos 12 meses, puede convertirse en dinero extra: Patines, cunas, muebles que solo ocupan espacio, regalos de matrimonio o cumpleaños sin abrir, etc.
Adiós a la infancia
Si sus hijos ya piden permiso para ir a una fiesta de Año Nuevo, es hora entonces de vender los coches, juguetes, sillas de comer y demás productos y accesorios infantiles antes de que se echen a perder por la falta de uso.
¿En busca de nuevas aventuras?
Cambiar de moto o automóvil (o venderlo si ya el tráfico es insoportable) es una buena idea, y son dos de los productos más buscados por los peruanos. Quizás luego de venderlo sea necesaria una bicicleta para escapar del calor del transporte público o incluso ejercitarse. Seguramente haya más de una bicicleta llenándose de polvo que se puede convertir en dinero extra para su actual dueño.
La tecnología manda
Las nuevas generaciones quieren estar actualizadas pero a veces no tienen el dinero suficiente para comprar un producto nuevo. Por ello, poner a la venta productos tecnológicos usados como celulares, computadoras o tablets que funcionen con normalidad resultará un negocio seguro.
Cocina equipada
Esta época del año, en que la recurrencia a la cocina se intensifica y más cuando los peruanos buscan probar nuevas recetas y fusiones, es buena para poner a la venta electrodomésticos como microondas, licuadoras, cocinas, refrigeradoras, cafeteras, etc.
Monetizar con lo que ya no se usa, es la opción de estas fiestas de fin de año; la plataforma que podría usarse se encuentra disponible en el mundo; sin embargo, no es la única, muchas otras pueden ser una alternativa para amenguar los gastos que el consumismo obliga como la Navidad; una fecha que anteriormente fue de religiosidad.