ERP/Ayabaca. Un fuerte contingente policial, de más de 400 efectivos, tiene bajo control la ciudad piurana de Ayabaca, luego de los enfrentamientos ocurridos en las últimas horas protagonizados por comuneros y pobladores que se enfrentaron a la policía rechazando la reelección del alcalde Víctor Marchena Villegas.
Este miércoles en horas de la tarde, se produjo un nuevo enfrentamiento en el Barrio La Esperanza, donde nuevamente resultaron heridos varios ronderos que se enfrentaron a la policía, que tomó el control de las calles y vigila todos los accesos hacia ella ante la versión de que comuneros de otros distritos llegarían a Ayabaca para sumarse a los manifestantes.
Cabe señalar que, en horas de la mañana, también se produjo una protesta en la que los manifestantes quemaron llantas y bloquearon la trocha entre Ayabaca y Aragoto evitando el tránsito hacia la frontera con Ecuador, pero fueron dispersados por la policía, que nuevamente tuvo que usar la fuerza para restablecer el orden público.
Se supo que, por medidas de seguridad, el alcalde Marchena se encuentra fuera de la provincia, mientras que sus hijos piden garantías para su vida. En tanto, los efectivos policiales han habilitado un acceso para el tránsito de turistas y devotos de la imagen del señor Cautivo.
Por el momento, las clases en todos los colegios han sido suspendidas, así como las labores en instituciones públicas y privadas, mientras que los establecimientos comerciales se mantuvieron cerrados por temor a desmanes y saqueos.
Las oficinas que sufrieron daños debido a los incendios ocasionados son, el almacén del programa Vaso de Leche, los consultorios médicos municipales, el área de Asuntos Sociales y Maestranza, que funcionaban en el coliseo cerrado y la propia municipalidad. Enmtodas ellas los trabajadores ediles iniciaron la remoción y limpieza de escombros. A esto se suman ocho unidades vehiculares municipales que quedaron inservibles tras ser quemadas por los protestantes.
Según información policial, pobladores de Pacaipampa, Aragoto, Sicchez entre otras localidades se vienen reuniendo para volver a protestar, por lo que la policía, como medida preventiva, no permite las reuniones masivas de pobladores ni el ingreso de vehículos al centro de la ciudad.