ERP/A.Abad. Enfoque. Lo peor de todo es que los escasos policías encargados de velar por el cumplimiento de las reglas viales brillan por su ausencia.
Todo indica que el promocionado Reglamento Nacional de Tránsito y las anunciadas multas peatonales quedaron sólo para el recuerdo y en el papel, pues ni los conductores de vehículos ni los peatones e preocupan por respetar las normas establecidas y aún vigentes.
Lo peor de todo es que los efectivos policiales encargados de velar por el cumplimiento de las reglas viales no se abastecen y, en el peor de los casos, prefieren pasar por alto las constantes violaciones a la legislación.
Así lo pudo comprobar ayer El Regional de Piura – Prensa Digital Talara durante un breve recorrido efectuado el sábado por algunas arterias de la ciudad, donde se detectó que tanto los transeúntes como las unidades vehiculares hacen caso omiso del reglamento y se burlan de éstas en las mismas narices de la PNP.
Por ejemplo, al promediar las 11 de la mañana, en la intersección de la Avenida Mártires Petroleros con la Avenidas A un grupo de peatones cruzaban la calzada sin tener en cuenta que la luz del semáforo estaba en verde para los carros, señal que les prohibía cruzar la pista de un extremo a otro. Sin embargo, en lugar de custodiar la zona, a pocos metros del lugar un policía en moto conversaba de lo más entretenido con una dama sin percatarse del hecho.
Solo unos minutos después, en la intersección de la misma Avenida Mártires Petroleros con la Avenida D, un imprudente mototaxista permanecía estacionado en el cruce peatonal mientras la luz en rojo del semáforo daba la preferencia del cruce a los transeúntes.
El otro caso sucedió en la intersección de la Avenida H con la Avenida E (a inmediaciones del sector La Florida anexo del Mercado Modelo), al promediar las 3 de la tarde. En el lugar un irresponsable chofer de combi pasaba cuando el semáforo estaba en rojo y le prohibía avanzar. Al igual que en el caso anterior, ningún efectivo de Tránsito se encontraba en la zona para imponer las sanciones ni multas correspondientes.
Esta situación se reitera a menudo en diferentes puntos de las principales avenidas, sobre todo en zonas cercanas a los mercados, hospitales y el centro de la ciudad, donde ni conductores ni peatones respetan las reglas de tránsito, ante la ausencia de los policías de tránsito.
Algunos vecinos consultados por este medio de prensa digital opinan que lo que falta es que se pongan severas multas y papeletas y si es posible meter a los vehículos infractores al depósito pues se trata de faltas graves. Se lamentaron que haya policías que negocian, con los conductores infractores, las imprudencias y faltas que éstos últimos cometen.