ERP. Al menos 24 personas entre hombres y mujeres (10 de ellas extranjeras) fueron intervenidas durante un operativo llevado a cabo la noche del viernes y durante el toque de queda, libando licor e incumpliendo las medidas de bioseguridad para evitar el contagio del COVID-19, en el interior de un bar y una discoteca de esta ciudad petrolera, siendo conducidos a la comisaría sectorial para su identificación y aplicación de las multas correspondientes.
10 Extranjeras y 6 parroquianos en discoteca
Diez ciudadanas extranjeras, entre colombianas y venezolanas, una peruana y cinco parroquianos fueron intervenidas por la Policía Nacional del Perú, en un operativo conjunto con la Municipalidad Provincial de Talara, al interior de una discoteca ubicada en la avenida B.
El nerviosismo de tres jóvenes, que fueron sorprendidos libando licor en el exterior del local, encendió la alerta entre los efectivos policiales, que tras ingresar a la "Rica C" notaron la presencia de las extranjeras, sin mascarilla y aglomeradas en la barra, a la espera de más clientes para acompañarlos a consumir bebidas alcohólicas y fuera del horario permitido para transitar, debido a la pandemia del COVID-19.
Con apoyo del personal de la gerencia de Seguridad Ciudadana y las subgerencias de Fiscalización y Serenazgo de la Municipalidad Provincial de Talara, los agentes trasladaron a los intervenidos a la comisaría Sectorial para su identificación y la aplicación de la multa correspondiente.
Por otro lado en el operativo también ubicaron cajas de cervezas vacías y debajo de una cama fueron encontradas tres personas - dos varones y una mujer - que consumían licor, junto a cinco más, al interior de un local ubicado en el parque 3, que no solamente funcionaba de manera clandestina, pues existe una orden de clausura en su contra, sino que además infringía todos los protocolos de bioseguridad dispuestos por el Ministerio de Salud para evitar mayores contagios a consecuencia del COVID-19.
A pesar que las mujeres intentaron ocultar las evidencias de su infracción, los efectivos policiales pudieron ingresar y sorprender a los parroquianos y féminas en plena celebración, incluso una de ellas - en su afán por evitar su traslado a la comisaría - la emprendió a golpes contra los agentes de la comisaría Sectorial.
Producto de la intervención, tal como dicta la norma, se decomisó una congeladora y gran cantidad de cerveza y tragos que eran ofrecidos en este lugar.