Pariñas/Talara (ERP). En el servicio de laboratorio. Las denuncias de los pacientes del Hospital de Essalud por el mal servicio que se brinda, en los últimos tiempos se ha vuelto una constante. Pacientes y familiares, a menudo, denuncian sobre el maltrato que reciben.
En esta oportunidad, le tocó al comunicador social Jaime Palacios Litano, quien el viernes 20 de mayo, al promediar las 8 de la noche, tuvo que llevar al menor de sus hijos por emergencia del Hospital II Talara de Essalud, teniendo que denunciar una total inoperatividad en el servicio de Laboratorio.
Palacios narra que una vez ingresado por emergencia su menor hijo Alexander Palacios tras ser auscultado por el médico de turno, éste solicitó unos análisis; motivo por el cual acompañado por su esposa y el pequeño paciente se dirigieron al Laboratorio del hospital.
“Grande fue mi sorpresa cuando luego de llamar a la puerta del servicio de laboratorio salió para atenderlo un tipo en estado de ebriedad, pues su aliento lo delataba”, relató Palacios Litano.
Agrega que de inmediato hizo su reclamo ante el médico de turno, remarcándole que no es posible que en un área tan importante como Laboratorio se permita que una persona ebria realice los análisis que solicita el médico de turno. El comunicador social dijo que averiguó que este servidor de Essalud Talara responde al nombre de Carlos Infante, esperando que la alta dirección del centro de salud que encabeza el Dr. Mao Zeta haya tomado cartas en este asunto que genera desconfianza y la desaprobación de los pacientes del servicio que allí se brinda.
Lo cierto es que son innumerables las quejas que reiteradamente los pacientes, es decir los asegurados y sus familiares, hacen público a través de los medios de comunicación. Acusan a los trabajadores (personal médico, asistencial y administrativos) de ser insensibles e indiferentes con los pacientes, olvidándose que gracias a los aportes de los asegurados y de las empresas que contribuyen a la seguridad social, es que los trabajadores de Essalud pueden recibir sus jugosos honorarios.