ERP. El jefe del Estado, Ollanta Humala, presidió ayer la Septuagésima Séptima Edición de la Ceremonia del Cambio de Guardia a Caballo, actividades de cierre en lo que va de su gobierno el mismo que oficialmente termina el próximo 28 de julio, cuando asuma el mandato Pedro Pablo Kuczynski, flamte presidente constitucional del Perú.
Estuvo acompañado de su esposa, Nadine Heredia, y de sus hijas Illary y Nayra, además del menor Samín, con quienes se ubicó en la Puerta de Honor de Palacio de Gobierno. Ellos residen en la casa de Gobierno, la misma que desocuparán para que la ocupe el futuro gobernante.
La tradicional ceremonia, que se realizó en el Patio de Honor de Palacio de Gobierno, estuvo a cargo de la escolta del Regimiento “Mariscal Domingo Nieto”, perteneciente al Ejército del Perú y Guardia de Honor de Palacio de Gobierno.
La ceremonia se inició con el ingreso de la banda de músicos del Ejército Peruano al Patio de Honor de la sede del Ejecutivo, seguido del despliegue de un gran número de ejemplares de equinos. Posteriormente, la Escuela de Equitación del Ejército realizó una exhibición de la destreza y habilidades, al compás de diversas melodías interpretadas por la banda de músicos.
El acto, que se realizó en el marco del programa “Palacio para todos”, fue presenciado por un centenar de estudiantes de la Institución Educativa República de Panamá. Asimismo, ubicados en distintas tribunas frente a Palacio de Gobierno, niños, adultos y visitantes extranjeros apreciaron las destrezas que ejecutaron los jinetes al realizar diversas acrobacias.
Al finalizar el acto, el presidente Ollanta Humala, su esposa e hijos se despidieron de los presentes desde la Puerta de Honor, tras lo cual ingresaron a la sede del Ejecutivo. Se trata del último cambio de guardia dominical del presidente Ollanta Humala, cuyo mandato finaliza el 28 de julio.
Ollanta Humala se irá con una baja aprobación popular y desgastado por acusaciones en contra de su esposa Nadine Heredia y parientes de la misma, acusados de no sustentar ingentes ingresos que fueron usados de manera personal y no para financiar su organización política.