Bellavista. La municipalidad distrital de Bellavista viene asestando un duro golpe a los vendedores de combustible de procedencia ecuatoriana que expenden en pequeños puestos rodantes y en plena vía pública a vista y paciencia de los vecinos.
Un caso palpable se registró el pasado fin de semana cuando Fiscalización, Policía Municipal y efectivos de serenazgo realizó un operativo, detectando que en la vivienda de calle Ancash Nº481 de Juana Aponte Castro vendían gasolina ecuatoriana, procediéndose con el decomiso del producto.
Lo mismo sucedió con el puesto ambulante, ubicado en la calle Ancash Nº498 de propiedad de Georginia Saavedra Olaya, quien sin el mayor escrúpulo expendía combustible ecuatoriano y envasado en botellas de 2 y tres soles cada una.
Por último, el mayor puesto ambulante de gasolina ecuatoriana fue el ubicado en la Transversal Cóndor Nª1045, donde la dueña por lo más irresponsable atacó a las autoridades municipales con palabras irreproducibles, llegando hasta el insulto por el hecho de no dejarla vender el combustible.