ERP. El 66% de mujeres mayores de 18 años ha sufrido violencia física, psicológica o ambas, mientras que el 58% de mujeres entre 15 y 49 años ha sufrido algún tipo de violencia por parte de su pareja, de acuerdo con datos expuestos por Dante Carhuavilca, jefe del INEI, sobre la base de la ENARES y la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar (ENDES).
¿Qué creencias se ocultan detrás de estas cifras? Sobre ello giró el 9no Diálogo Virtual CIES: Perú Sostenible, que también contó con la participación de Daniela Viteri, directora de la Dirección General contra la Violencia de Género; Silvia Arispe, directora del Programa Nacional para la Prevención y Erradicación de la Violencia Contra las Mujeres e Integrantes del Grupo Familiar (AURORA), y Jennie Dador, presidenta del Consejo Directivo de Promsex.
Mitos vs. Realidad
"Pequeñas faltas de respeto como un grito, una mala palabra no son violencia. Si no hay golpes, no hay violencia", "las mujeres que sufren violencia sexual o doméstica, provocan el abuso debido a sus conductas inapropiadas", "solo las mujeres pobres sufren violencia". De acuerdo con Carhuavilca, mitos como estos son muy arraigados, pero inciertos: la violencia psicológica ha afectado al 62% de mujeres mayores de 18 años y al 55% de niños(as) entre 9 a 11 años.
Además, 68% de mujeres han sido víctimas de violencia alguna vez en su vida, y en todos los quintiles de ingresos, la violencia está por encima del 50%, por lo que no es real la afirmación de que solo los niveles socioeconómicos sean propensos a la violencia.
Alarmante es también el nivel de tolerancia frente a la violencia y, en general, a imaginarios que relegan a las mujeres a ciertos roles o comportamientos esperados. Así, pues, según la ENARES, 33% de la población considera que "la mujer infiel debe tener alguna forma de castigo por parte de su pareja", 53% considera que debe cumplir su "rol" de madre y esposa, después cumplir sus sueños; y 26% que debe estar dispuesta a tener relaciones sexuales cuando su pareja lo desee.
Estas cifras son especialmente preocupantes dado que, como explicó Carhuavilca, "en este contexto de pandemia, según las NN.UU., el nivel de violencia se ha incrementado".
Viteri: "Trabajar con evidencia es sumamente importante, y también medir el impacto de nuestras acciones a través de la ENARES".
La funcionaria del MIMP subrayó que la violencia está tan naturalizada que no se identifica como tal: "Este conocimiento que puede parecer contraintuitivo, que por un lado me manifiesto en contra de la violencia hacia la mujer y por otro lado la tolero, nos deja un aprendizaje al MIMP sobre la base de la evidencia". Expuso que se está trabajando en un programa presupuestal orientado a resultados que tiene 17 productos y servicios enfocados en prevenir la violencia.
Además, "también estamos trabajando en un marco conceptual sólido y lineamientos" enfocado en prevención. No obstante, afirmó que la violencia ha estado disminuyendo lenta pero sostenidamente en los últimos años: en el 2015, 68.2% de mujeres sufrió algún tipo de violencia; mientras que en el 2019, 67.6%. Asimismo, hay muchas más mujeres las que denuncian, pero aún así la cifra es muy baja a comparación de la proyección total de víctimas.
Arispe: "Desde el MIMP combatimos contra las creencias y las realidades"
A su turno, Arispe relevó la importancia de la ENARES en su trabajo como gestora pública. AURORA es el programa de los servicios del MIMP. La violencia psicológica representa la mayor cantidad de casos denunciados a través de los servicios del MIMP, principalmente a través de los 398 Centros de Emergencia Mujer (CEM) a nivel nacional. En segundo lugar, se encuentra la violencia física, luego la sexual y finalmente la violencia económica. Otro dato alarmante es que dentro de las víctimas de violencia sexual, la mayoría son niñas, niños y adolescentes. Por esa razón, Arispe acotó que el MIMP trabaja en el programa "Hombres por la igualdad", desde el cual se busca cambiar los imaginarios sobre las masculinidades como un esfuerzo por involucrar a los varones en la lucha contra la violencia.
Dador: "La nuestra es una cultura de violencia y de violación"
Por su parte, Dador mostró su asombro porque en a nivel mundial, 1 de cada 3 mujeres han sido victimizadas, mientras que, en el Perú, entre 6 y 7 de cada 10. "Es realidad cuando se dice que la nuestra es una cultura de violencia y de violación. Al margen de que estemos disminuyendo los niveles, aún son altísimos". Además, resaltó lo temprano del inicio de la violencia, debido a que usualmente se habla de violencia en mujeres adultas, pero la ENARES demuestra que está presente desde la niñez.
"La violencia nos ha enseñado que niñas o niños que atestiguan o sufren violencia en su hogar, son predeciblemente en su adultez maltratadores en el caso de los varones, y víctimas en el caso de las mujeres". De ahí que sea muy importante intervenir desde ahora con aquellos niños y niñas víctimas, para que no repitan los mismos patrones a futuro. Exhortó usar un enfoque de atención —ya no solo preventivo— para abordar a este segmento etario.