ERP. Eugenio D'Medina Lora, es un conocido analista peruano, con quien dialogamos para conocer sus percepciones y puntos de vista sobre el acontecer nacional y regional. Sobre el voto de confianza logrado por René Cornejo es claro al señalar que algo pasó el fin de semana para que después varios congresistas replanteen su voto; sobre Ollanta Humala, no duda en manifestar que será un mandatario que se le recuerde como que el cargo le "quedó grande". En sus declaraciones, Eugenio D'Medina, precisa que no hay un contrapeso de las regiones con Lima y los fracasos de Villanueva y Simon, son una muestra. Aquí sus declaraciones:
Se ha devenido en una crisis política, por decisiones equívocas. ¿Qué lecciones se pueden sacar de este momento convulso, donde las críticas van con gabinete "marioneta" e intromisiones innecesarias?.
EDM: Las mismas lecciones que debimos sacar con Fujimori, que la presencia de poderes paralelos y extra oficiales no conducen sino a crisis políticas, porque abonan en la sensación de poca transparencia de las decisiones de Estado respecto a la ciudadanía. Y que esto, más temprano que tarde, impacta en la economía. Esto vale a todos los niveles de gobierno.
Ollanta Humala, viene decreciendo en su aceptación popular, el haberse alejado de su fuente electoral, ¿lo está perjudicando ahora?
EDM: Es cierto que una parte de su caudal electoral lo pierde Humala al optar por continuar el modelo económico de los noventa, pero no veo en ello la causa de la caída en picada de la aceptación presidencial. En el primer año y medio Humala ha tenido niveles de aceptación superiores incluso al 30% con el que ganó la primera vuelta y ya estaba jugado por el modelo económico ortodoxo. Lo que lo ha hecho caer es su evidente falta de liderazgo y, como consecuencia de esto, la mayor presencia de su esposa como poder fáctico, que ha tenido como epítome la caída del Gabinete Villanueva y la asunción del Gabinete Cornejo.
¿Y esto se ha visto reflejado en el voto de confianza al nuevo gabinete?
EDM: Sin duda. Pero lo penoso ha sido ver el comportamiento errático del Congreso, que tampoco ayuda a mejorar el rostro político del Perú. Parece que ha habido una nueva repartija porque muchos votaron en negativo el viernes para especular a ver qué se les ofrecía el fin de semana para cambiar a positivo su voto el lunes. Emitieron una luz ambar para al final dar luz verde de todas maneras. Eso no fortalece la democracia, sino la hace quedar como un simple número de circo.
Mirado los resultados económicos y la gestión política, ¿se podría decir que es el resultado de gobierno o la dinámica del mercado?
EDM: Hay una parte de cada uno. El mercado ha adquirido velocidad propia y es a esto a lo que llamamos piloto automático. Pero también es cierto que si la política económica fuera distinta, el mercado "cojearía" más de lo que lo hace ahora. Y cojea porque la política en general hace mucho ruido por los desaciertos en los que recae el gobierno. Lo mejor que puede hacer Humala ya no es emprender grandes reformas sino evitar generar ruido político, pues carece del liderazgo suficiente para transformaciones fuertes que hacen falta para darle más velocidad al crecimiento económico.
Se evidencia en declaraciones y opiniones, que el presidente de la República no tiene una dimensión de estadista, no es un Correa o un Lula. ¿Crees que algo ha avanzado?.
EDM: No, al contrario, me parece que el candidato interesante que le parecía a algunos se ha develado como un mandatario al que vamos a recordar como que notoriamente el cargo le quedó grande.
En programas sociales, se ha avanzado y somos tan exitosos como se promociona?
EDM: Se sobrestima el poder de los programas sociales. No se crece ni se vence a la pobreza con programas asistencialistas. El gobierno cometió un error garrafal de aumentar el gasto público con fines clientelistas en estos programas, cuando debió enfocarse en mejorar la eficiencia de los ya existentes, orientando recursos en enfocarlos en que vayan las ayudas a los que realmente lo necesitan. El ejemplo más notorio del fracaso es Qali Warma.
Dentro de dos años, se realizarán las elecciones generales, que se puede esperar?. ¿Keiko, Alan García, Kuczynski, un outsider?
EDM. Muy peligroso es dar un pronóstico de esa naturaleza en el Perú sin riesgo de caer en el ridículo. Sí puedo jugármela en el sentido de que descarto a un outsider, menos a un presidente regional, con el fracaso que ha resultado Villanueva, demostrando que una cosa es el manejo regional y otra la plaza de Lima. También le pasó a Simon en el gobierno de García.
En este panorama, ¿Nadine Heredia debería salir a la palestra y desafiar normatividad electoral?.
EDM: Tengo claro que Heredia no ganaría las elecciones después del desgaste de las últimas semana. Además, es muy distinto que una encuesta diga que uno es simpático y otra muy diferente es que esa misma gente voto por uno en determinada elección. Mira el caso de Castañeda Lossio en la pasada elección presidencial, un alcalde que termina con 80% de aprobación, logró apenas 10% de los votos. Saltarse la normatividad no se justificaría para Heredia y terminaría por mellar sus posibilidades para el 2021, donde sí puede ser una carta fuerte dependiendo de lo que haga en estos próximos inmediatos años.
En el plano regional, ¿se podría decidir que se ha dado un retroceso en la descentralización?
EDM: Esto es nítido. Desde el gobierno de García y con este de Humala no hay verdadero estímulo a la descentralización. E incluso me atrevo a pensar que en este gobierno, el trauma de Conga ha generado una corriente de re-centralización. Si a esto le unimos que los presidentes regionales actuales se comportan como alcaldes menores, no hay contrapesos. No hay un liderazgo que reivindique lo regional. Miremos a César Villanueva, como dije, seguramente el mejor presidente regional pero fracasó en Lima. Los gobiernos regionales deben apostar a mejorar su imagen como gestores del desarrollo y esto se logra con proyectos de impacto que les den visibilidad nacional.
Estuviste como asesor del presidente regional de Piura, luego escribiste que era un fiasco. ¿La opinión se sigue manteniendo?
EDM: Javier y yo atravesamos un momento difícil por el conflicto producido entre el Gobierno Regional de Piura y la EPS Grau cuando me tocó presidirla, me parece más generado por terceros que no aconsejaron bien al presidente regional. En ese momento cada uno defendió una posición y lo que me pareció un fiasco fue el desperdicio de la oportunidad que tuvo en sus manos el Gobierno Regional de Piura para resolver el problema del agua potable en las cinco provincias más pobladas de Piura. Todavía le queda un año en que puede dar impulso a proyectos interesantes e incluso tentar la reelección. Yo deseo que lo haga y que tenga éxito. Cuando estuvimos juntos incluso formamos la Agencia Regional de Fomento de la Inversión Privada de Piura pero mi salida parece que desanimó al presidente de continuar con ese proyecto. Considero que es necesario impulsar grandes inversiones en Piura. Como no soy rencoroso, le escribí incluso por Navidad a Atkins después, ya que entiendo que éramos amigos, pero no recibí respuesta.
¿Esa experiencia te dejó un mal sabor?
EDM: Al contrario. Tengo grandes amigos en Piura y pasado el tiempo, mucha gente me dice que los problemas continúan en particular, con el tema del agua y el desague. Sé de los esfuerzos de los profesionales de la EPS Grau con quienes guardo hasta ahora una linda amistad, pero tienen el cuello de botella de la deuda inmensa de la empresa. No se entendió en su momento la solución que propusimos, pero pasado el tiempo, sé que incluso las críticas que recibí por buscar incorporar capitales a la empresa fueron convenientes para mi experiencia política personal. No hay rencores con nadie.
Desde esa experiencia ¿no has regresado a Piura?
EDM: Lo he hecho, pero no para asuntos oficiales. Sin embargo, he seguido trabajando por Piura en proyectos que no han salido a la luz pública, porque lo hice como parte de equipos de trabajo de entidades internacionales. Tengo un sentimiento muy especial por Piura que nada lo va a cambiar.
Sin embargo, las actuaciones individuales de gente que se creen Mesías, ¿son parte de las distorsiones de esta democracia?.
EDM: Me atrevería a decir que más que distorsiones, son consecuencias de tener democracias tan débiles. Mira a América Latina y verás que eso es moneda corriente, con excepción de Chile y México, posiblemente. Cuando las institucionalidades son débiles, el espacio para los "elegidos" aumenta. Y normalmente, sabemos que todo el que se autopredica mesías no pasa de ser un charlatán con alta credibilidad.
Demasiados movimientos regionales, demasiados partidos, pero poca actuación política. Esto podría mejorarse, o seguiremos en este rumbo de partidos precarios?.
EDM: El problema no es que haya pocos partidos, sino que los partidos que existen no tienen capacidad de conceptualizar un mensaje suficientemente atrapante para masas críticas de ciudadanos por tiempos prolongados. Los mismos que eligieron a Humala en 2011 pudieron elegir a Keiko. Y en las regiones, ¿por qué abundan los movimientos regionales? Porque simplemente la gente no cree en los partidos. Entonces el problema no es que hay muchos partidos, sino que no hay buenos partidos. Finalmente, no hay poca actuación política, sino escasísima política de calidad. Aquí todos se sienten estadistas porque acceden a un micrófono o porque pueden comentar en Facebook o Twitter, pero viven una ilusión. Para la política de calidad hay que tener formación, tiempo, madurez y por supuesto, talento e inteligencia.