06
Vie, Sep

Dina Boluarte llegó a la ciudad de Sullana con susto y se retiró a sobresaltos

Andrés Vera Córdova
Typography
  • Smaller Small Medium Big Bigger
  • Default Helvetica Segoe Georgia Times

ERP. Nadie la quiere, la presidenta Dina Boluarte Zegarra llegó a la ciudad de Sullana, para realizar ostentación de una obra que no le pertenece, pero que ufana lo muestra como suyo; sin embargo, lo que pretendió ser una festividad se convirtió en la oportunidad para que sullaneros y sullaneras expresan su rechazo tal y conforme lo hacen los peruanos del centro y del sur.

Para el Lic. Andrés Vera, el uso policial para darle seguridad interna y externa de los lugares donde se presenta la mandataria, es exagerado, excesivo, desmedido e incluso indebido. No existen precedentes que exhiben este nivel de movilización y quizá se justifica por la desaprobación que no es diferente a otros lugares. Los peruanos y peruanas rechazan a Dina Boluarte.

Varios sullaneros, se acercaron a la institución educativa que fue inaugurada por la mandataria, pese a que el inicio de la obra correspondió a otro gobierno, en las afueras muchos intentaban llegar y exigirle que haya mayor preocupación por los niveles de violencia delincuencial que se vive en esta ciudad, pero fueron impedidos de avanzar y de acercarse a la mandataria.

Los policías encendieron las bocinas, para evitar que las protestas se escuchen, pero los ciudadanos no se amilanaron y expresaron su oposición a una mandataria que es ampliamente cuestionada. Una indignada mujer preguntaba a los presentes si eran de la localidad y que, si conocían la realidad e incluso hacía lo mismo, con los policías, a quienes se les señala como responsables del mal trabajo en seguridad ciudadana.

La presencia en esta localidad de Dina Boluarte, fue una exposición excesiva de la fuerza policial; pero se pudo observar a un ministro de Educación ido y quizá desconocedor de la realidad provincial, le preguntaron sobre la obra del colegio nacional Carlos Augusto Salaverry y simplemente se hizo el desatento. Lo cierto que dicha obra lleva más de 8 años abandonada y no existe solución al corto plazo.

Protestaron por las aguas servidas que afloran a las calles, debido a la falta de capacidad de la empresa prestadora y falta de recursos; la inseguridad ciudadana que tiene a los sicarios actuando a libre albedrío y sin control. La violencia asesina ha superado a la Policía Nacional del Perú e incluso han superado a dicha institución.

Diario El Regional de Piura
 

Publicidad Aral1

Paypal1