ERP. El gobierno peruano, tomado por una mayoría derechista que antes gritó fraude y ahora se mantienen silentes con una mandataria incapaz de oponerse a medidas arbitrarias, viene llevando al Estado hacia una situación que antes transitaron Venezuela, Nicaragua e incluso Haití. El Poder Ejecutivo, se lavó “las manos”, no observó la ley considerada de impunidad y dejó que el Congreso lo haga.
A partir del día siguiente de la promulgación de la Ley de “Impunidad”, cualquier sentenciado podría solicitar su libertad, al haber sido condenado por delitos considerados de lesa humanidad. Las víctimas, que exigieron año a año, se haga justicia por algún asesinato y finalmente lo lograron, deberán solo contemplar lo que el Estado aplica por decisiones irresponsables.
En efecto, como lo anunció Gustavo Adrianzén Olaya, decidieron no observar la norma que decide respecto a la aplicación de los delitos de lesa humanidad, demostrando ampliamente el nivel de contubernio que existe en el Poder Ejecutivo y Legislativo, y facilitando que este último autorice la promulgación de la norma, la misma que lleva el número N° 32107, promulgación en contra de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Lo paradójico de esta acción, es que esta violación de las resoluciones dictadas por la Corte Interamericana de Derechos Humanos, es avalada por profesionales que antes defendían a ultranza al Sistema Interamericano de Derechos Humanos, como lo era Adrianzén Olaya, ante de ser Primer Ministro. Esta acción, acerca a Perú a la calificación de régimen autoritario, pasando a una posición peligrosa en las democracias del mundo.
Excongresista condenado por violación
Freddy Díaz excongresista de Alianza para el Progreso, deberá cumplir 13 años y 4 meses de cárcel por el delito de violación, acto que incluso fue cometido en el propio Congreso de la república, demostrando la falta de valores y el nivel delincuencial de estos sujetos que fueron elegidos como parlamentarios. El Poder Judicial lo encontró culpable y deberá ir a la cárcel.
Es necesario recordar que en lo obtuso de este Congreso, calificado como “El congreso de los delincuentes” pretendió blindarlo para evitar que su caso llegue al Poder Judicial; sin embargo, la presión ciudadana, impidió que logren su cometido.
De preso casi moribundo a condenado con suerte
Alberto Fujimori Fujimori, el dictador de los 90, estaba, de acuerdo a sus familiares y políticos que lo apoyan, estaba casi moribundo; luego de aplicarse a la mala el indulto que le dio el expresidente Pedro Pablo Kuczynski, goza de libertad y además de ello, pretende ser el candidato presidencial de Fuerza Popular y de yapa, le han asignado en contra de la Ley una pensión mensual.
Lo que llama la atención es que la Mesa Directiva tiene injerencia de Fuerza Popular y de Alianza para el Progreso, organización que llevó al Congreso a Freddy Díaz. Estas dos organizaciones y otras avalan los desatinos del Congreso de la República.
