ERP. Uno de los personajes más popularizados dentro de la historia nacional, es José Domingo Choquehuanca, abogado y político, que se destacara por la arenga que pronunció frente al Libertador Simón Bolívar, el 2 de agosto de 1825, cuando el Gran Venezolano estaba de paso hacia el sur.
Por Miguel Arturo Seminario Ojeda
Director del Museo Electoral y de la Democracia de la DNEF del Jurado Nacional de Elecciones
José Domingo Choquehuanca nació en Azángaro, el 4 de agosto de 1789, fue hijo de José Gregorio Choquehuanca, canónigo de la Iglesia Metropolitana de La Plata, descendiente de la nobleza indígena, dentro del seno de una familia rica y con poder, quien era además, caballero de la orden de Carlos III, su madre María Mercedes Béjar y León Túpac Amaru Mulli Puraca, era descendiente de Paullu Inca, hijo del Inca Huayna Cápac.
Vivió en Azángaro y en Chuquisaca, capital de la Real Audiencia de Charcas, donde fue colegial del Real Convictorio de San Juan Bautista. Se graduó y doctoró en Teología y en Derecho en la Universidad Mayor Real y Pontificia San Francisco Xavier de Chuquisaca, obteniendo su título de abogado ante la Real Audiencia en 1814, de acuerdo a las disposiciones de la época.
Fue alcalde y justicia mayor de Azángaro desde 1817, y al paso del Libertador Bolívar por el pueblo de Pucará, salió a su encuentro, pronunciando la arenga que recogió y grabó para siempre la Historia, tanto como su nombre, En esa ocasión dijo:
"Quiso Dios de salvajes formar un gran imperio y creó a Manco Cápac; pecó su raza y lanzó a Pizarro. Después de tres siglos de expiaciones ha tenido piedad de la América y os ha creado a vos. Sois pues, el hombre de un designio providencial. Nada de lo hecho hasta ahora se asemeja a lo que habéis hecho, y para que alguno pueda imitaros será preciso que haya un mundo por libertar. Habéis fundado tres repúblicas que en el inmenso desarrollo a que están llamadas, elevan vuestra estatua a donde ninguna ha llegado. Con los siglos crecerá vuestra gloria como crece la sombra cuando el sol declina".
Y no se equivocó, la figura se Simón Bolívar sigue elevada en el pináculo que le reservaron los tiempos, como se le ha evocado al conmemorarse el Bicentenario de la Proclamación de la Independencia Nacional, y se seguirá haciendo hasta el año 2024 y siguientes.
Fue diputado por Azángaro en 1825, y fue un fiel bolivariano, siendo condecorado con la medalla cívica creada por el Congreso; al poco tiempo se incorporó a la Junta Departamental de Puno por 5 años a partir de 1827. En 1832 actuó como senador por Puno, y presentó proyectos para la abolición del fuero eclesiástico y la extinción de los servicios personales de los indios, con los que tanto se identificara.
En su carrera política desempeñó los cargos de prefecto de Puno en 1835, y subprefecto de Huancané en 1836, siendo al parecer partidario de la Confederación Perú-Boliviana, que fraccionaba la integridad territorial y cultural del Perú. Fue autor del Ensayo de estadística completa de la provincia de Azángaro, publicado en 1833.