ERP. Un grupo de trabajadores de una empresa que brinda seguridad a la Refinería de Petroperú en Talara, denunciaron haber sido despedidos de manera arbitraria por parte de la empleadora, anunciando que iniciarán una serie de medidas a fin de que sean repuestos a sus centros de labores.
Los casi 60 agentes de vigilancia de la empresa Seguritas Sac, compuestos por supervisores, jefes de grupo, apoyo industrial y vigilantes con una trayectoria de 15 a 25 años de servicio ininterrumpida en el área de Refinería Petroperú-Talara, realizando labor de control de accesos, recorrido de oleoductos y protección de instalaciones, indicaron que el responsable de la empresa de seguridad en la zona norte del país, Juan Luís Díaz Hidalgo, de manera intimidante ha iniciado una serie de acciones abusivas en contra del personal que brinda servicio en la refinería, entre las que destaca el despido del personal con argumentos difamatorios como el haber asegurado que un grupo habría falsificado la firma del responsable de la administración para poder retirar sus CTS.
Los ahora desempleados refirieron que, Juan Luís Díaz, para continuar con su plan de despido arbitrario, ha puesto en marcha la firma de contrato mensual de sus trabajadores cuando el contrato de Seguritas Sac firmado con Petroperú es de cada seis meses, con el propósito de que los puestos sean ocupados por personal estable proveniente de Tumbes donde la empresa ha perdido algunos contratos.
Mencionaron que lo que viene ocurriendo en la Refinería de Talara es consecuencia de una serie de posibles actos de corrupción entre el responsable de la empresa de seguridad y los responsables de la gerencia y subgerencia de seguridad de Petroperú en Lima, Carlos Centurión y Henry Requena.
Culminaron indicando haber puesto de conocimiento lo ocurrido al presidente del directorio de Petroperú, Carlos Eduardo Paredes Lanatta, a fin de que se tomen acciones urgentes en contra de posibles actos de corrupción que perjudica a la masa obrera, además de iniciar una serie de medidas de fuerza como la de una marcha de protesta, una huelga de hambre, entre otros, con el propósito de ser repuestos de su centro de trabajo.