ERP. El exdictador Alberto Fujimori Fujimori (86) quien gobernó el país democráticamente del 28 de julio hasta el 5 de abril de 1992; quien después siguió haciéndolo como dictador hasta la convocatoria de nuevas elecciones en 1995. Gobernó hasta el 21 de noviembre del 2000, cuando acorralado por problemas fugó hacia Brunei, para después renunciar vía Fax desde el Japón.
Fujimori tuvo en vida una militancia que reconstruyeron sus seguidores después de fugar del país, manteniendo viva la organización política inspiradas en su nombre; para esta actividad, gozaron de recursos significativos que le permitían no solo sustentar candidatos, sino igualmente realizar con mucha solvencia por todo el país.
Tras la fuga del dictador, el fujimorismo quedó bastante impactado y rechazado por la mayoría de peruanos y peruanas; después de la extradición sufrió condena en una cárcel construida con el fin de mantenerlo preso en condición diferente a otros reos; además de ello, gozaba de prerrogativas como salidas para algunas actividades más personales de salud. Se puede decir que tuvo una cárcel “dorada”.
Pedro Pablo Kuczynski, aprovechó su condición de presidente de la República y la amistad con el entonces congresista Kenji Fujimori, para otorgarle un indulto, que fue calificado por la misma hija Keiko Fujimori como malhadado. Tras un breve período de libertad, fue retornado a la cárcel por disposición de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Todo cambio para Fujimori, con el actual Tribunal Constitucional, el cual haciendo tabla rasa del derecho internacional, se validó el indulto considerando que la Corte Interamericana de Derechos Humanos, no puede emitir fallos que contravengan el derecho interno. Los mismos magistrados del Tribunal Constitucional, se encargaron de exigir el cumplimiento del indulto, gozando con la complicidad de Dina Boluarte Zegarra y sus ministros.
Ya libre, Fujimori, quien en teoría se encontraba gravemente enfermo, comenzó a realizar actividades políticas, lo que fue reprobado por sus opositores, pero defendido por el actual régimen que tiene contubernio entre el legislativo de influencia fujimorista y Poder Ejecutivo, quien prácticamente es una “marioneta” de lo que decide una mayoría congresal formada por Fuerza Popular, Avanza País, Alianza para el Progreso y Renovación Popular.
La secuencia de su muerte
El exdictador no pudo superar las enfermedades diversas que lo hacían recaer cada cierto tiempo; su médico Alejandro Aguinaga se pronunció de una manera escueta y la familia mantuvo en todo momento reserva sobre el real estado de salud de Fujimori, aunque algunos indicios comenzaron a realizar especulaciones. El Gobierno de Dina Boluarte, hizo votos para que se supere su enfermedad, lo que fue duramente cuestionado.
Desde tempranas horas del 11 de septiembre, se informó que el estado de salud era bastante grave y en aspectos contradictorios muchos seguidores o adláteres pedían rezar por Fujimori debido a la gravedad de su estado de salud. Como se recuerda, en su gobierno se cometieron varios delitos de lesa humanidad, lo que al ser extraditado de chile fue condenado a 25 años de pena privativa de la libertad.
Después de urdirse un indulto con serias ilegalidades y pese a lo resuelto por la Corte Interamericana de Derechos Humanos, se procedió a liberarlo en la gestión actual del Tribunal Constitucional. Perú ingresó a la situación de desacato ante la instancia internacional, para quien era inviable tal medida de libertad, por respeto al derecho de las víctimas de obtener justicia.
Los cargos que más le costaron al exdictador, fueron las matanzas de Barrios Altos y de estudiantes de la Cantuta. Fue tan cruel la forma como se ejecutó a estas personas, que el Poder Judicial, lo encontró responsable como responsable mediato de estos crímenes. Además de estos delitos, aún se tramitan otros por lesa humanidad, pese a las decisiones del Congreso de la República.
Fue condenado en otras acusaciones, sobre todo por corrupción, aunque sus seguidores trataban de sustraerle de responsabilidades. Fujimori, no solo fue un dictador, también fue condenador como asesino mediato y por actos de corrupción, cuya reparación civil nunca pagó, pese a su interés de participar en las próximas elecciones generales del 2026. Su senilidad era evidente, pero para justiciar su indulto, trataron de confundir a la población en general.
El final de un dictador
Pese a que intentaron mantener una imagen positiva del dictador Fujimori, lo cierto es que fuertemente rechazado, su gobierno calificado como violador de los derechos humanos y corrupto. Su hija Keiko Fujimori, ha sido protagonista de hechos políticos antidemocráticos como lo sucedido en el último proceso electoral, cuando se habló de fraude al desconocer el triunfo de Pedro Castillo Terrones.
Réquiem para un dictador.