Por realizar almacenamiento indebido de sus residuos sólidos.
Sullana. Ante las presuntas negligencias médicas que se estarían presentando en establecimientos privados de la ciudad, la Unidad de Fiscalización de la comuna provincial, participó de la inspección inopinada que realizó la Fiscalía de Prevención del Delito a la clínica María Auxiliadora, para comprobar sus condiciones sanitarias.
El jefe de la Unidad de Fiscalización, Sebastián Oblea Siancas, solicitó al propietario del establecimiento, su licencia de funcionamiento y el certificado de Defensa Civil, comprobando que la documentación se encuentra en regla.
Sin embargo, se pudo comprobar que el almacenamiento de los residuos sólidos de la clínica no cumple con las normas técnicas, ya que los tachos no cuentan con las tapas respectivas y la disposición final de los desechos se realiza en el botadero municipal, lo cual no está permitido.
El inspector sanitario de la DESA – Sullana, Francisco Lozano Ramos, señaló que según las declaraciones del dueño del establecimiento, Antonio Borrero Vargas, los residuos médicos, son arrojados en el botadero municipal luego de rociarles formol, incumpliendo con las normas sanitarias para esta clase de desechos.
Por ello, se procedió a multar al propietario de la clínica con el 60% de una UIT, equivalente a 2 mil 310 soles, por almacenar inadecuadamente sus residuos hospitalarios. Asimismo, se consignó en el acta de fiscalización la presencia de un vector (cucaracha) en la sala de operaciones N°3 y el vencimiento de todos los extintores del local.
Al concluir la inspección por parte de la Unidad de Fiscalización, el propietario del establecimiento, se negó a firmar el acta respectiva.
La fiscal adjunta de la Fiscalía de Prevención del Delito, fue quien corroboró la presencia del vector. Por su parte, el encargado de Salud de la Personas de la Dirección Subregional de Salud “Luciano Castillo”, Armando Romero Vásquez, señaló que según los documentos de la clínica, esta cuenta con categoría II – 2, sin embargo, carece de una Unidad de Cuidados Intensivos, tal y como lo exige la norma.
El galeno, también informó que la clínica no ha consignado en su nómina de expediente, que en sus instalaciones se realizan operaciones estéticas a cargo de cirujanos plásticos.
Asimismo, comprobó que carece de un carro de paro y de un desfibrilador, equipos indispensables en el tópico de cualquier establecimiento que cuenta con dicha categoría.
Es la tercera vez que la Unidad de Fiscalización de la Municipalidad de Sullana, sanciona a una clínica por el indebido tratamiento que le dan sus residuos hospitalarios. Anteriormente, se multó a las clínicas Santa Rosa y Olguín, por arrojar sus desechos médicos a la vía pública.
