ERP. Las vacancias presidenciales están perfectamente definidas en la Constitución Política del Perú y entre ellas se encuentra la de permanente incapacidad moral cuyas interpretaciones son diversas. Justamente, aprovechando esta causal se someterá por segunda vez al presidente Martín Vizcarra, quien accedió al cargo mediante un procedimiento similar. La fecha establecida para este barullo es el 9 de noviembre.
Lo que existe hasta el momento, son denuncias de aspirantes a colaboradores eficaces respecto a presuntas responsabilidades penales. De ser cierto, son delitos que deberán seguir su curso y que no corresponde al Congreso de la República determinar la calidad moral del presidente Vizcarra por esos hechos, sobre todo porque es una investigación en proceso y sin existir cargos en su contra.
Actualmente, Ollanta Humala Tasso, Keiko Fujimori y otros se encuentran investigados por presuntos delitos de esa naturaleza; transcurrido el tiempo, siguen sin tener acusación formal e incluso, aprovechan la oportunidad para participar como candidatos en los próximos comicios generales. Siguiendo el mismo destino de estos investigados se le acusa a Vizcarra de haber recibido coimas cuando era gobernador de Moquegua.
El mandatario actual, culminará su mandato el 28 de julio del 2021; sin embargo, existe un empecinamiento por vacarlo; las razones han sido expuestas en la oportunidad anterior; se presume el interés de parte por generar desestabilización del país por parte de fuerzas antisistema y por el otro lado, un presunto interés de Acción Popular para hacerse de la presidencia de la República.
En el mes de septiembre, cuando se tramitó una medida similar, fueron tantas las evidencias del presunto complot que quedó al descubierto. Llamadas a los altos mandos de las Fuerzas Armadas por parte de Manuel Merino de Lama, hubieran sido suficientes para presentar medidas legales; sin embargo, se dejó de lado toda reacción y ahora nuevamente el mandatario deberá enfrentarse al ludibrio de fuerzas políticas adversas.
Si bien es cierto que el Tribunal Constitucional tramita una demanda competencial para definir los fundamentos lógicos y jurídicos de la permanente incapacidad moral, la medida cautelar que se presentó en la primera acción fue rechazada. De acuerdo a los especialistas podría presentarse una acción similar para que se suspenda la convocatoria prevista para el 9 de noviembre.
De lo contrario, el presidente Vizcarra deberá presentarse él o su abogado ante el Pleno del Congreso para defenderse y luego esperar. Según la votación para la admisión de la moción de vacancia Acción Popular no desiste de hacer presidente a Manuel Merino de Lama y de manera paralela marchan en el mismo sentido Unión por el Perú, una parte de Podemos, otra del Frente Amplio y el Frepap.
Toda esta crispación aparentemente excesiva, es impredecible en su resultado.