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Dom, Abr

La defensa de la patria, piuranos en la batalla de San Juan: 13 de enero de 1881

Miguel Arturo Seminario Ojeda
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ERP. La defensa de su patria, es quizá la prueba más grande de nacionalismo, de parte de quienes han nacido en determinados espacios, en todos los tiempos, desde que se organizaron las sociedades, y se constituyeron las naciones, la patria se convierte en el símbolo que representa la bandera, para avanzar, más allá.

Por Miguel Arturo Seminario Ojeda

Director del Museo Electoral y de la Democracia de la DNEF del Jurado Nacional de Elecciones

Y en esto, intervienen hombres y mujeres, que sin considerar la edad, se inmolan por su heredad. Ejemplos los hay en todo el globo terráqueo, páginas cargadas de heroísmo, que también se vivieron en el Perú prehispánico, cuando los incas sometieron a las sociedades vecinas, incorporándolas al imperio incaico.

El nombre de Miguel Grau es el más conocido entre los piuranos, cuando recuerdan a sus paisanos actuando en la defensa de la patria, sin embargo, al lado de Caballero de los mares, los hubo otros que sin tener el rango del ilustre hijo de Piura, ni el protagonismo que lo convirtió en un personaje universal, esos otros también ofrendaron su vida por la patria y en muchos casos sobrevivieron, siempre defendiéndola.

Muchos piuranos y sullaneros, y de toda la Región, participaron en la Guerra con Chile, como se registra en la documentación trabajada principalmente en el Archivo Histórico Militar del Centro de Estudios Histórico Militares del Perú; y en la Biblioteca Nacional, en el Instituto Riva Agüero, en el Archivo Parroquial y en el Municipal de Sullana, en el Archivo Regional de Piura, y en el Archivo General de la Nación.

La juventud piurana y la defensa de la patria

Después del Combate de Angamos, y de las batallas de Arica y Tarapacá, el objetivo chileno se centró en la Capital de la República, y para defenderla, se alistó lo mejor de la juventud peruana, adolescentes y jóvenes de toda condición socio económica se aprestaron a poner su pecho por su patria, y de la ciudad de Lima, en cuyos contornos se libraron las batallas de San Juan, Chorrillos y Miraflores en enero de 1881, ahí se destacarían varios piuranos.

Aunque no se han popularizado como Angamos, Arica y Tarapacá, la batalla de San Juan y Chorrillos es recordada cada año, fue una acción militar protagonizada el 13 de enero de 1881, enfrentándose el Ejército de Chile y el Ejército nuestro. Su escenario fueron los campos de Villa, las pampas de San Juan y Santa Teresa, tanto como el cerro Marcavilca, el morro Solar y el pueblo de Chorrillos. Se presume que esta batalla fue la más grande de las libradas durante esta guerra.

la gesta de Lima

La victoria correspondió al ejército chileno, que continuó con incendios y saqueos en Chorrillos y Barranco. Tras una corta tregua considerada en el Armisticio de San Juan, se produjo la batalla de Miraflores, y acto seguido los chilenos entraron a Lima y ocuparon la capital peruana, sin destrozos como en Chorrillos y Barranco, por la mediación que hizo el francés Abel Bergasse Du Petit Thouars, de grata recordación entre los peruanos.

El protagonismo de los piuranos

El protagonismo de los piuranos en la batalla de San Juan, está ampliamente documentado. En general, este episodio de nuestra historia, ha sido tratado en muchos libros, y en artículos sobre el tema publicados en el Perú, y en el extranjero, y a nivel regional se ha difundido solo sobre algunos de sus protagonistas, olvidando a la mayoría de los combatientes dela región.

Para la defensa de la patria, cada departamento fue obligado a formar un contingente de acuerdo al número de su población. Los distritos colaboraron de acuerdo a la relación enviada desde Lima. La población de Piura en condiciones de alistarse, fue de 11.938, teniendo en cuenta a la población masculina de 18 a 30 años, correspondía a Piura aportar 1835, que sumados a los 300 militares ya en ejercicio, sumaban los 2.135 que se consideró.

Entre los enrolados se contó a los sullaneros Mercedes Mena Girón, Clemente Alvarado Regalado, Nicolás Zapata Avalo y otros que lucharon en la defensa de Lima en 1881, cuando los chilenos y peruanos se enfrentaron en San Juan y Miraflores. Clemente Alvarado Regalado combatió contra los chilenos defendiendo el honor nacional.

El Batallón Piura

En el expediente correspondiente, sobre el Batallón Piura, existente en el Archivo Histórico Militar del Centro de estudios Histórico Militares del Perú, que preside el general Juan Urbano Revilla, se registra a la tropa y a la plana mayor conformada por Augusto Seminario y Vascones, José María Vera Tudela y el sargento mayor, militar de carrera, don Ignacio Seminario Guzman, así como a Daniel Merino, Francisco Vera y García, y Leónidas Echeandía Otoya.

El Batallón Piura Nº 67 se organizó bajo las órdenes del Coronel Augusto Seminario y Váscones, José María Vera y Tudela y de Ignacio Seminario Guzmán, primo hermano de Miguel Grau Seminario, tanto como del jefe del batallón. La población piurana en general, por su parte contribuyó con dinero y especies para equipar al batallón que se formó en la tierra del ya desaparecido Miguel grau Seminario. A este batallón, le hemos seguido la huella, con documentación del Archivo Histórico Militar, teniendo el detalle que es muy largo de publicar en un solo artículo.

El sargento mayor Ignacio Seminario Guzmán, los hermanos Seminario Cortés y otros piuranos

En San Juan y Choriillos, el 13 de enero de 1881, rindieron la vida, el tercer jefe Sargento Mayor Ignacio Seminario Guzman, el Teniente N. Infantas, el teniente ayudante Mayor Daniel Merino, y los subtenientes Pedro Varillas, Enrique Vázquez, Juan Guerrero y Nemesio Medina, así como el sargento primero Teodoro García Paz, y los cabos Miguel Alméstar, José L. Guzmán, y M. Palma.

Los restos del sargento mayor (equivalente a comandante en el actual escalafón), Ignacio Seminario Guzmán nunca se encontraron, pero figurando en la relación de muertos, en la gestión del general Jorge Carlin Arce, presidiendo el Centro de Estudios Histórico Militares del Perú, su nombre fue inscrito en una de las placas conmemorativas de la Cripta de los Héroes, que recuerdan los nombres de los defensores de la patria. Fue hijo de Miguel Seminario del Castillo, y de Lucía Guzman Palomino.

Pasada la guerra, su viuda Rafaela Matheus Mesones cobró la pensión correspondiente y fue a residir a la ciudad de Lima donde falleció en abril de 1911, siendo sepultada en el Cementerio General de Lima, hoy Presbítero Maestro. Actualmente sus descendientes residen en Sullana, Talara, Piura, Lima, y otras ciudades del país y del exterior.

Pelearon y murieron en la batalla de San Juan, los hermanos Toribio y Alberto Seminario Cortés, piuranos, hijos de José Toribio Seminario Váscones, y de María Dolores Cortes Romero, nacidos en 1863 y 1864, respectivamente. Ambos ingresaron al Colegio Militar el 8 de agosto de 1878, del que por razones de la guerra egresaron como soldados, el 3 de julio de 1879.

Toribio fue destinado a la sexta compañía del regimiento Lanceros de Torata, donde gradualmente ascendió a sargento segundo, sargento primero, y a alférez de caballería. Alberto obtuvo el grado de subteniente, y fue destinado al regimiento Lanceros del Rímac, y a otros cuerpos. Murió combatiendo en la brigada de Artillería Volante.

En San Juan y Miraflores combatieron los piuranos Ciríaco Aguirre Condemarín, Baltazar Machado que fue el músico del Batallón Piura. También Juan Vilela y José Zapata. Sus nombres figuran en la nómina de heridos peruanos en la Batalla de Miraflores, el 15 de enero de 1881, se publicó en "La Actualidad", órgano del ejército de ocupación, con esto acreditaron su participación.

En la batalla resultaron heridos el primer jefe Augusto Seminario y Vascones, quien recibió un balazo en el vientre, el sargento Nicolás Silva, los subtenientes Esmeraldo Arica, Manuel García Herrera, Baltazar Maticorena y el Sub Ayudante Francisco Vera y García. Con ellos han muchos heridos más, y los que resultaron ilesos, siguieron combatiendo en otras acciones, por la defensa de la patria.

Otro de los combatientes poco conocido fue Mercedes Mena Girón, quien militó en la Segunda Compañía de la que fue capitán don Parcemón Morales, combatiendo en San Juan y Miraflores en enero de 1881, cayendo gravemente herido en la segunda batalla cuando un balazo le atravesó el maxilar derecho. De aquí le resultó una cicatriz que ostentaba orgulloso, porque fue en defensa de la patria.

Los nombres de varios combatientes de San Juan y de Miraflores, el 13 y 15 de enero de 1881, figuran en la placa conmemorativa en la Estatua de La Libertad (Pola), en la Plaza Mayor de la ciudad de Piura.

Diario El Regional de Piura
 

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