ERP/Miguel Arturo Seminario Ojeda. Quizá el fundador del diario El Tiempo de Piura, don Luis Carranza, no se imaginó nunca, que 100 años después, este medio de comunicación social se iba a convertir en el informativo escrito de mayor vida en la historia de la región, medio que iba a permanecer vencedor por un siglo, convirtiéndose en una crónica de registro para la historia de un espacio, donde más de un millón de voces estarán diciendo como yo, con toda seguridad: El Tiempo, ha vencido al tiempo.
Este importante diario de Piura, fue fundado en enero de 1916 por un hombre de visión profunda, con cuya acción se llenó un vació en ese espacio de la tierra de Grau, Salaverry, Cossio del Pomar, Ignacio Merino, Jorge Moscol, Juan Acha, Miguel Maticorena Estrada, Guillermo Riofrío Morales, y otros tantos personajes que vieron la luz, en el antiguo gran espacio que nos ata a todos los que hemos nacido en cualquiera de sus rincones.
Nunca antes la dinámica social de la región había contado con un espacio de difusión permanente, que tras largos 100 años lo convirtió en el soporte donde se registra cada día lo que acontece en todos los ámbitos de la pluricotidianidad laboral, afectiva, recreativa y asociativa de los piuranos, no hay duda, El Tiempo, ha vencido al tiempo, y eso debe ser motivo de orgullo para los piuranos y neopiuranos, que nacidos o afincados en Piura, se acercan a su quehacer diario, acompañados de una edición impresa impecable en la presentación y en la noticia, que ha generado un profundo respeto hacia este prestigioso medio de comunicación.
La Historia se registra en todo tipo de soportes que los convierten en fuentes para recrear el pasado, para reconstruir los procesos protagonizados por hombres y mujeres en una determinada época, y, El Tiempo, sin lugar a dudas, es una fuente documental inagotable, que lo transforma en dador de información para interpretar el pasado, desde la mirada particular de cada uno de los investigadores. Como fuente documental lo hemos consultado en Piura y en Lima, en la Capital de la República lo hemos leído en la Biblioteca Nacional y en la biblioteca del Instituto Riva Agüero de la Pontificia Universidad Católica, y eso no priva que se halle en otros repositorios documentales de Lima.
Soy lector de este diario desde la infancia, desde que recuerdo los días en mi casa paterna, siempre estaba El Tiempo, y en 1967, cuando presidí el Club de Periodismo, Ciro Alegría, en el Instituto Experimental José Cardó de Sullana, era nuestro principal instrumento para las lecturas diarias del noticiero en el patio principal de nuestro plantel primario. Nos resultaba desesperante, no contar con ese diario alguna vez a la semana, nos habíamos acostumbrado a sus noticias y artículos, que el no tenerlo significaba una gran ausencia, y más aún, cuando teníamos que alejarnos fuera de Piura, realidad tan distinta a la actual, ahora que El Tiempo se puede leer donde haya piuranos en el planeta, en cualquier lugar del globo terráqueo. Que distinto era despertarse a los gritos de los canillitas coreando a viva voz por las calles: “El Tiempo, La Industria, El Norte”, después convertida en “Tiempo, Correo, Norte”, frente a la nueva realidad virtual que nos permite leer el diario y enterarnos de las noticias a través de El Tiempo, aunque estemos en el espacio.
Plumas para nunca olvidar, son las esteban Puig, José Estrada Morales, Carlos Robles Rázuri, Néstor S. Martos, Rómulo León Zaldívar, y con toda seguridad, si revisamos profundamente el diario, encontraremos la pluma de Enrique López Albújar, de Abraham Valdelomar, de Mario Vargas Llosa, y otros escritores de figura notable.
A través de El Tiempo, conocemos la dinámica de la Región Piura, y de buena parte del país, nos hemos enterado de los conflictos sociales, de las pugnas, y de todos los procesos sociales de cooperación, contradicción, solidaridad y competición, El Tiempo ha registrado nuestra historia, ha ido tejiendo los sucesos diarios con el plomo derretido al comienzo, desde el frío, con la rotativa y luego con las máquinas offset que superaron a la litografía. El Tiempo es un diario de puertas abiertas, lo sabemos los que escribimos en sus páginas, y Semana, su suplemento cultural es una publicación de colección, creo que no se puede concebir un domingo en Piura, sin leer el suplemento del diario El Tiempo.
Han pasado 100 años, el 9 de enero se cumplieron, fue un gran aniversario, es la coronación de un ayerto de gloria que merece ser celebrado durante todo el 2016, teniendo en cuenta que este diario es un espejo de información actual, y de información que puede ser analizada desde la perspectiva de la Historia, la Economía, la Psicología, la Antropología, la literatura, el arte, la Ecología, el folclor, la Teología, y vista desde todas las aristas que caben en la imaginación. Salud, diario El Tiempo!
Miguel Arturo Seminario Ojeda/Presidente Honorario de la Asociación Cultural Tallán.