ERP. El presidente de la República, Pedro Pablo Kuczynski, aseguró que, si el Congreso aprueba la vacancia, estaría cometiendo un golpe de Estado. Sin embargo, su situación se encuentra sumamente agravada y la permanencia sería una dura lección para la propia población que avalaría el hecho díscolo de un mandatario que fue descubierto tras la elección de los negocios realizados cuando fue Ministro.
“Absolutamente, esto sería un golpe de Estado. Yo no creo que va a pasar, pero sería un golpe de Estado”, manifestó en entrevista que publica hoy el diario El Trome. Para otros analistas, la medida que se viene adoptando es totalmente constitucional y simplemente es el consecuente cuando un mandatario tiene incapacidad moral permanente que es la causal que se invoca.
Según todas las evidencias, Pedro Pablo Kuczynski ha sido un funcionario que ha cometido delitos y acciones prohibidas en calidad de Ministro; todas las investigaciones lo señalan como infractor y frente a ello, es posible que sea vacado, sin embargo, esta medida deberá ser adoptada por el Congreso de la República cuyos votos no se encuentran aún confirmados.
PPK, quien ha mentido durante varias veces y es un mitómano recurrente, comentó en la entrevista que la incapacidad mencionada el artículo 113 de la Constitución está referida a la “capacidad mental” o a la posibilidad de que el presidente de la República sea afectado por el Alzheimer u otra enfermedad. En su defensa usa términos y conceptos que ahora aboga; pero de ninguna manera es capaz de reconocer los actos ilegales que habría realizado.
“O sea, eso es algo totalmente inaplicable. El artículo 117 de la Constitución dice que solo puede ser vacado un presidente por no convocar a elecciones, por salir fuera del país sin permiso, cosas muy puntuales que no se aplican”, manifestó.
Asimismo, Kuczynski recordó que desde un principio de su gobierno hubo un sector que se fijó como objetivo sacarlo del cargo.
“Hubo un grupo que cuando yo fui al Congreso a juramentar ni siquiera se levantó, no quiso aplaudir ni siquiera formalmente y siempre me decían “no te vamos a sacar”. O sea, estaban pensando en eso desde el primer día”, reflexionó.
El jefe del Estado negó haberse referido a una persona en particular cuando dijo que había “traidores” en su entorno cuyo objetivo era sacarlo del cargo.
“(…) Yo lo puse en mi plancha presidencial. Yo creo que él fue un buen gobernador de Moquegua. Lo hizo bien en el sector Educación. Ahora está de embajador en un país importante para nosotros, que es Canadá”, manifestó en referencia al primer vicepresidente Martín Vizcarra.
“He hablado con él hace quince días. Yo le dije: Oye, tú tienes que apoyar, ¿no?”, agregó.
Al hacer una autocrítica de su gestión, el jefe del Estado mencionó que ha subestimado las intenciones de sus adversarios y consideró que debió “hablar más con ellos”.
El presidente Kuczynski ratificó que no ha cometido ninguna irregularidad o acto de corrupción y criticó al informe de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), el cual señala que transfirió fuerte sumas de dinero a su chofer y al congresista Gilbert Violeta.
“Lo que han hecho es agarrar todos mis ingresos que vienen de cosas que nada tienen que ver con el Perú y los han atribuido a Odebrecht. Es una vergüenza ese informe”, dijo.
Aseguró también que se ha enterado recientemente de los negocios de la empresa Westfield con Odebrecht, los cuales, subrayó, fueron firmados por el empresario chileno Gerardo Sepúlveda.
Por otro lado, el primer mandatario dijo no arrepentirse de haber concedido el indulto humanitario al expresidente Alberto Fujimori, y subrayó que a su juicio el Perú necesita reconciliación.(Andina)