ERP. La elección y asunción del mando del magnate Donald Trump como presidente de los Estados Unidos de Norteamérica ha crispado los ánimos de miles de mujeres, quienes ven peligrar sus derechos, como consecuencia de la actitud del mandatario, cuyas expresiones misóginas han sido bastante difundidas y comentadas, antes de la campaña, en la campaña y ahora como máximo responsable político de USA.
En tal sentido, más de 200,000 personas asistieron a la Marcha de las Mujeres en Washington DC para exigir equidad de género en el segundo día de Trump como presidente. Varias celebridades viajaron a DC y a las más de 600 marchas organizadas en los cinco continentes en solidaridad por los derechos de la mujer.
Lo que podría haber sido una expresión de solidaridad y de reivindicación de mujeres en cualquier país de América Latina, se presentó en el corazón mismo, de uno de los países enarbolados con la bandera de la libertad y de la democracia. Lo que se escuchó en esta marcha de miles de personas, de autobuses repletos, de caminatas y cantos a la libertad, simplemente fue apoteósica.
Se estima que entre 3.7 y 4.5 millones de personas participaron en protestas por todo Estados Unidos el sábado, según la lista de concentraciones y datos disponibles recogida por analistas americanos. El objetivo central es resistir al nuevo presidente y sobre todo, llevarlo al plan de la institucionalidad y del respeto de todas las americanas y no americanas que residen en Estados Unidos.
Resistencia a Trump
La marcha de mujeres de los Estados Unidos, busca derechos igualitarios para todos y todas, protestar además contra el machismo, la xenofobia y otros tipos de discriminación, que el actual presidente ha mantenido y que para muchos le ha permitido el triunfo electoral. Sin embargo, estos valores contrastan con lo construido a través de siglos en el país más desarrollado del mundo.
Existen razones para dudar de este magnate, primero llamó “asquerosa” a Hillary Clinton y luego opina de forma cáustica contra actrices o mujeres que participan en la política. En los carteles la palabra más popular era " pussy", la manera vulgar de llamar a los genitales femeninos y que Donald Trump se vanaglorió de “agarrar” sin preguntar con sus “manos".
Que las une a las mujeres que protestan?
No es una marcha con un solo objetivo o con una misma concepción, quizá lo único que es común está relacionado con el rechazo por la manera ligera de referirse a las mujeres por parte de Trump; en la marcha por el contrario unas hablaban sobre la integración del género “fluido” y otras sobre el medio ambiente y ambas con la palabra feminismo, pero con acepciones diferentes.
Llevando al plano de análisis, no solo ha ganado un nacionalista, que busca “devolver el poder a los americanos”; sino alguien que no escatima decir frases llenas de odio, xenofobia, y como se diría en América Latina, un personaje clásico y machista, que piensa que la mujer no tiene más derechos que el de procreación.
Según los informes noticiosos de Estados Unidos, la mayor parte de las marchantes, habían votado por Hillary Clinton, pero muchas dijeron no haber estado muy activas en política durante la campaña de la primera mujer candidata de Estados Unidos y que ganó en votos de electores, pero perdió por el sistema de representación americano.
Más como sucede también en países de menos desarrollo, la presencia de mujeres en el Congreso no ha variado en absoluto y los cambios son solo de décimas, por cuanto la representación de la mujer en los cuerpos legislativos ha cambiado del 24.4 al 24.8%. Esto implica, que la marcha podría derivar hacia un mayor empoderamiento de las mujeres en política y masiva elección de mujeres para los cargos congresales.
Algunas ideas sobre el problema
Trump ha reemplazado en los cargos importantes, con políticos blancos; las mujeres solo tienen un rol en cargos de menor importancia en la administración del presidente; lo que indica claramente que no existe igualdad.
Es lógico entender que la perspectiva de políticas influenciadas por hombres sería diferente si lo es también por mujeres. Bajo esta lógica existe preocupación por quienes brindan opinión u asesoramiento al presidente Trump.
Por el momento, la marcha ha conmovido a los americanos; sin embargo, lo cierto que Trump puede garantizar los 4 años siguientes convirtiéndose en el principal decisor de las políticas americanas, o ser solamente un elemento mediático que solivianta los ánimos de sus coterráneos, pero que la institucionalidad es más fuerte para resquebrajarla.
Por lo tanto, existen muchas cosas por conocer y por resolver en Estados Unidos y con el presidente Trump, el cual muchas veces ha sido reprobado por sus mismos correligionarios del Partido Republicano.
De Ciudad de México a Washington DC, decenas de miles de manifestantes marcharon por las calles contra la toma de posesión del ahora 45° presidente de Estados Unidos. En algunas capitales, se registraron disturbios y enfrentamientos; sin embargo, los principales responsables de magnificar este hecho para Trump son los periodistas.