ERP. Mientras la mediación internacional acelera su misión para arrancar una tregua tras el alto número de muertos y heridos en los combates y ataques israelíes en el barrio gazatí de Shujaiya, la frontera entre Israel y la Franja de Gaza ha sido escenario de un nuevo intento de infiltración por parte del brazo armado del grupo islamista Hamas. 15 milicianos y al parecer varios soldados (aún por confirmar) han muerto en este nuevo capítulo de una violenta espiral que cumple hoy decimocuarta jornada.
Pasadas las seis de la mañana, entre 10 y 15 milicianos consiguieron penetrar en territorio israelí a través de dos de los túneles que Hamas construyó en los últimos años para conectar el norte de la Franja con Israel. Fuertemente armados y separados en dos comandos, han sido abatidos por soldados y la Fuerza Aérea israelí antes de que pudiesen entrar a la agrupación agrícola Nir Am. La Policía israelí ha cerrado herméticamente la zona cercana a la frontera ordenando a los habitantes de las localidades no salir de sus casas. El Ejército rastrea la zona ante el temor que hay más milicianos en el terreno.
Es la quinta vez desde el inicio de la ofensiva 'Margen Protector' el pasado 8 de julio que Hamas logra introducir a sus efectivos armados en territorio israelí gracias a sus túneles con el objetivo de atacar soldados o civiles del sur de Israel.
El Ejército israelí ha confirmado el tiroteo señalando que "al menos 10 terroristas han sido abatidos". Medios israelíes informaron posteriormente que eran 15.
Tras 14 días de contienda, el alcance de muertos supera los 500 en Gaza y 20 en Israel. Intensos ataques aéreos israelíes-uno de ellos contra la casa de un líder de Hamas en el sur de la Franja dejando varios civiles muertos entre ellos niños- y ráfagas de cohetes contra el sur de Israel marcan el inicio de una nueva jornada que se caracterizará por más bombardeos, ataques, combates y muertos.
El Ejército israelí aún no ha confirmado ni desmentido el anuncio anoche de Azzadin Al AQssam sobre la captura de uno de los soldados en los duros combates de Shujaiya. El anuncio en la televisión de Hamas provocó muestras de alegría en Gaza y algunos puntos de Cisjordania como Ramala.
El alto número de muertos-milicianos pero también decenas de civiles-en este populoso barrio situado en el cinturón de la ciudad de Gaza ha provocado la condena palestina. "Es una nueva matanza", coinciden en acusar todas las facciones desde Hamas hasta Al Fatah.
"Nada de tregua ahora. Israel pagará muy caro este crimen de guerra contra la población de Gaza", advirtió el portavoz islamista, Sami Abu Zuhri, que pide acciones a la Liga Árabe ("los ataques contra civiles son crimen de guerra", dijo el organismo) y la Tercera Intifada a Cisjordania. En este territorio se han declarado tres días de duelo y el Gobierno palestino ha pedido la "urgente intervención internacional para frenar los crímenes de guerra en Gaza".
Los testimonios de los habitantes de Shujaiya recogidos por las agencias locales indican que durante y después del combate, Israel atacó los edificios con intensa artillería y Fuerza Aérea.
"Shujaiya es un bastión terrorista de Hamas fortificado con una amplia red de túneles subterráneos. Desde esas calles, donde hay túneles y lanzaderas, fueron disparados más de 140 misiles contra Israel durante la ofensiva. Nos encontramos con fuego de armas automáticas y pesadas, misiles antitanque y RPG lanzados desde los edificios y casas. Hemos perdido muchos jóvenes en el combate", responde el portavoz militar, el capitán Roni Kaplan.
Desenlace
Shujaiya marcará el desenlace de la escalada. Aunque existe el temor que provoque un inmediato aumento del fuego, ciertamente ha acelerado la vía diplomática con la presencia en la zona del secretario de Estado norteamericano, John Kerry y el secretario general de la ONU Ban Ki-moon. Éste estuvo ayer junto al presidente palestino, Abu Mazen en Catar, un país clave en las negociaciones de tregua al ser el principal aliado político y económico de Hamas.
La sangrienta crisis de Gaza se ha convertido también en un frío instrumento más de la feroz guerra diplomática entre el bloque formado por Catar y Turquía que apoyan a Hamas frente a Egipto y Arabia Saudí que apuestan por Abu Mazen como gran interlocutor palestino.
El Cairo -que considera a Hamas un enemigo casi como lo ve Israel- estaría dispuesto a abrir de forma permanente el paso fronterizo de Rafaj si la terminal palestina está bajo control de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) de Abu Mazen.
Mientras en Gaza se suceden los funerales, centenares de casas están destruidas, decenas de miles se refugian en los centros de UNRWA y cabecillas y líderes de Hamas sigue escondiéndose y atacando desde túneles y búnkers, Israel lamenta la muerte de los 13 soldados de la brigada Golani en Shujaiya. No se recordaba un combate tan letal en Israel desde la segunda guerra del Líbano (2006). El brazo armado presume de la muerte de 18 militares desde el inicio de la ofensiva terrestre.
El gran dilema de Israel es si se limita a destruir los llamados "túneles terroristas" en la zona fronteriza o profundiza de forma significativa la operación terrestre lo que provocará numerosos muertos (soldados, milicianos y sobre todo civiles). Todo dependerá -dicen analistas locales- de la respuesta de Hamas a las propuestas de tregua y la mediación internacional.