ERP. Vicente Ignacio Silva Checa, señalado como integrante de la cúpula de la organización criminal que lideraría Keiko Fujimori, es el segundo en ir a prisión por decisión del juez Richard Concepción Carhuancho, quien consideró procedente la solicitud del fiscal José Domingo Pérez, responsable de la investigación por el caso conocido como "Los Cócteles".
En audiencia que se inició desde las 10 de la mañana, primero se contempló el requerimiento para Jorge Yoshiyama Sasaki, para en horas de la tarde informar que leería la resolución sobre el pedido de prisión preventiva. Cumpliendo con todas las formalidades que establece el Tribunal Constitucional el juez Richard Concepción Carhuancho, fue sustentando la decisión adoptada.
Para el Juez, pese a existir otras medidas, la prisión preventiva es la más idónea para cautelar que no interfieran en el proceso investigatorio. Se le acusa a Silva Checa, de haber sido un asesor en la sombra, y que cada una de las acciones que realizaba era a pedido de Keiko Fujimori, se tomó como casos específicos la intención de torcer la verdad en testigos, los contenidos del chat de la botica y otros elementos que dieron testigos proteguidos donde se le señala como integrante de la cúpula.
El juez sustentó el mandato de prisión preventiva contra Silva Checa argumentando que existe riesgo de evadir la justicia y de obstaculizar las investigaciones por el presunto delito de lavado de activos al interior de la agrupación Fuerza Popular.
Refirió que existe una alta probabilidad de que el investigado pertenece a la cúpula de la agrupación Fuerza Popular, presidida por Keiko Fujimori, que presuntamente manipuló y coaccionó a diversos testigos para que declaren de una forma contraria a la verdad.
El juez también señaló que existe la alta sospecha de que Silva Checa integró la cúpula de una presunta organización criminal que habría lavado activos de Odebrecht en la campaña electoral del 2011.
El abogado que estuvo vinculado con Vladimiro Montesinos, en la parte final de la resolución llegó al recinto judicial y tan pronto se terminó de leer el auto respectivo, se procedió a detenerlo.
