ERP/Sullana. Personal de la Beneficencia Pública en Sullana intervino dos de los once pabellones declarados en riesgo por Defensa Civil, en el marco de las actividades para preservar los restos mortuorios de las ánimas que allí descansan.
En tal sentido, se han iniciado el traslado de los restos reposados en los pabellones “San Venancio” y “San Antonio” del cementerio San José, para ser depositados en los osarios construidos recientemente.
Dicha actividad es en respuesta a la resolución directoral N° 037 que ordena el traslado de los muertos, previa autorización de la Dirección Regional de Salud en Piura junto con la opinión técnica de la gerencia de Gestión de Riesgo y Desastres de la comuna chirense y el colegio de Ingenieros.
Hay que indicar que de acuerdo con el documento referido, los pabellones “San Venancio”, “San Antonio” y “San Carlos” deberán ser demolidos y los restos depositados en osarios, estructuras de menor tamaño, debido a la amenaza inminente de las lluvias en la región.
Dichos pabellones fueron calificados de alto riesgo por Defensa Civil, toda vez que sus construcciones datan cronológicamente del año 80, las mismas que se han ido deteriorando por efectos de las lluvias y el transcurrir del tiempo.
Mientras que el presidente de la Beneficencia Pública, Óscar Navarro Mendoza; precisó que la dirección ha cumplido con los procedimientos señalados por las autoridades competentes, dando a conocer a los familiares de los difuntos a través de edictos publicados en el diario oficial y de circulación local.
“Los deudos se han acercado a la administración para firmar una declaración jurada de conformidad quedando satisfechos, dado que el costo de dicho traslado será asumido por la institución y así no afectará la economía del deudo y tendrán a sus difuntos protegidos en criptas recién construidas”, explicó. Son alrededor de 50 mil soles el costo total del traslado a los osarios construidos con fondos propios de la Beneficencia Pública.
Por tal motivo, se ha previsto la remoción de 324 restos mortuorios, los que en su mayoría han quedado convertidos en polvo que serán cuidadosamente ingresados en las tumbas pequeñas conocidas como osarios. “Se han iniciado los trabajos de traslado interno de los restos mortuorios de dos de los once pabellones que se encuentran en alto riesgo de derrumbe en el cementerio San José, los mismos que ponen en peligro la salud e integridad del público usuario y de los trabajadores del recinto”, sostuvo.
