ERP. El denominado Canal Vía de la ciudad de Sullana, se ha convertido en el “lunar” negro de la localidad desde hace varios años. El exalcalde Jorge Camino Calle terminó su mandato rechazado por la población del A.H. Sánchez Cerro, Carlos Távara Polo ofreció resolver su caótica situación y ya al borde de la culminación de su mandato adjudicó la reconstrucción, pasó el tiempo y ahora es un muladar en pleno centro.
Hemos informado en reiteradas oportunidades sobre el particular y lo hacemos nuevamente. Ha quedado demostrado que el actual alcalde Power Saldaña Sánchez, hizo poco para que los más de 16 millones de soles que costó su reconstrucción resuelvan el problema de la destrucción parcial de las lozas de concreto, del afloramiento de aguas residuales y de los enormes basurales.
Canal Vía de Sullana, una obra destruida y sin resolución inmediata
Tan pronto tomó el mando en el 2018, frente a una pequeña lluvia negoció con el contratista para postergar el inicio de la misma, quizá confundiendo que podría repetirse el desastre del año 2017. Esta situación obligó a la empresa responsable a dilatar los plazos y en consecuencia cumplir con las metas previstas.
Informes de Contraloría dieron cuenta de los problemas presentados y que conllevó a resolver el Contrato.
Los vecinos que residen en ambos lados del Canal Vía, no saben qué hacer. Han denunciado por medios de comunicación, lo ha hecho a diversas instituciones, pero el problema se hizo mayor cuando la obra se dio por culminada por parte de la contratista. Lo que se esperó sea una solución, fue un engaño. La obra, quedó totalmente mal y para compensar la irresponsabilidad, dejaron dos canaletas para que discurran de manera permanente las aguas servidas.
Las actividades se realizan entre el lodo y basurales
Según el regidor provincial Fernando Brossard del Rosario, el problema se ha planteado “En asamblea municipal, Contraloría, OEFA, medios periodísticos. Al propio contralor general de la República refiriéndose la necesidad de auditorías de cumplimiento. En estos momentos hay un control específico ya atribuyendo responsabilidades penales. Informes que en próximas semanas deben ser conocidas”.
Sullana, una de las ciudades más pobladas del país, no solo es un lugar inseguro por los niveles de violencia, desordenado por la falta de obras de ornato, sobre todo cochino por los afloramientos del alcantarillado. El Canal Vía, es el foco como para demostrar que, entre dichos de candidatos a alcalde y regidores y hechos, existe un trecho considerable. El Canal Vía es una cloaca pública.
Aguas servidas y basurales forman parte de esta triste realidad
En efecto, desde la naciente del mismo, ubicado en el sector La Selva, hasta su desembocadura en la naciente del Barrio Norte, la losa de concreto fue sepultada por aguas servidas que discurren a vista y paciencia de todos, estas aguas muchas de ellas con heces, transportan la basura que arrojan los mismos pobladores y además, la tierra que cae ha convertido en fango todo su trayecto.
Transitar por el Canal Vía es una situación deplorable
Durante el presente año, la ejecución de la obra del Proyecto de Tratamiento de Aguas Residuales, que ejecuta el Ministerio de Vivienda, ha incrementado el caos. Pese a ello, el sector transportes busca el lugar más adecuado para transitar de un lugar a otro, llevando en sus neumáticos heces, basura y aguas servidas. Los olores nauseabundos, se perciben por la zona del mercado, mercadillo y colegios como el Camote Morado o Matías Manzanilla.
Compradores y vendedores han normalizado precariedad del Canal Vía
Pese al discurrimiento permanente de aguas servidas, a la altura de la calle Dos de Mayo, el comercio ambulatorio ha normalizado esta realidad. Los compradores van de un lugar a otro, buscando el mejor precio; evidentemente, la buena conservación de los productos y el espacio adecuado para la venta es inexistente. Todo hace indicar que la normalización, pese a la suciedad y pestilencia, también es de los compradores.
Realmente es sorprendente ver las condiciones actuales del Canal Vía, suciedad, pestilencia, aguas servidas, basura, charcos, y una vida que se desarrolla como si ese tipo de situaciones fueran tan normales, que deben aceptarse. “No reclamamos, porque nadie nos escucha, en cada campaña electoral para alcalde escuchamos lo mismo, ya se anuncian algunos candidatos y es probable que repitan las mismas promesas que quedarán en engaños” aduce un comerciante de la calle Dos de Mayo.
Compradores vadean Canal Vía entre lodazales y aguas servidas
Con la misma voz lastimera, una vecina, quien siempre reportaba sus quejas a través de este diario nos expresa “Tenemos un Estado que no nos protege, que nos abandona y no resuelve los problemas, se hace mal el expediente técnico, se agrava en la ejecución y al final siempre seguiremos los perjudicados”.
Vale recordar que dicho canal, inexistente al año 1983, se construyó con la finalidad de evacuar las aguas de lluvia. Se encuentra próximo el verano y las precipitaciones atípicas siempre son una posibilidad; de suceder, traerán al presente la necesidad de resolver los problemas a tiempo y no esperar que haya un desastre para recién actuar. Sullana, requiere autoridades con mucha más responsabilidad y conciencia.
Situación deplorable que las autoridades municipales desatienden
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