ERP/Miguel Arturo Seminario Ojeda. El algarrobo piurano es una de la variedades de este encanto de la naturaleza, que también crece en otros países con el mismo nombre. En Piura, una de las canciones más representativas se llama como él, y asimismo hay barrios enteros y zonas urbanas con ese nombre, es decir, es un símbolo de Piura y de gran parte del Perú, como lo es la yerba mate para la Argentina y Paraguay. En julio del corriente año, la Asociación Ruta de la Yerba Mate, y el Municipio de El Tigre, en Buenos Aires, Argentina, organizaron una actividad denominada "Por la ruta del mate", destacando lo que significa esta yerba para los argentinos.
Entre nosotros los piuranos, el algarrobo tiene un hondo significado, lo relacionamos con nuestra cotidianidad, su sombra, sus vainas, el puño, el yupicin, la algarrobina, la leña, el carbón, y todo lo que es para los piuranos ese árbol plebeyo para la poesía. El poema de Teodoro Garcés Negrón es muy elocuente, expresa lo que todos los piuranos queremos decir al algarrobo, igual que como decía de manera jocosa, cuando se refería al burro, que "Lo que hizo el burro en Piura, no lo hizo ningún diputado".
Burro y algarrobo, un binomio bien enraizados en Piura, y convertidos en una especie de motores de nuestra economía en los siglos pasados, por eso, bien vale la pena, que coincidentemente con lo que se ha hecho en la Argentina, se organice el recorrido POR LA RUTA DEL ALGARROBO, como lo ha planificado en su plan de trabajo, la directora del Museo de Sullana, Carmen Cruz Delgado, quien apoyada por su gran equipo de quehacer cultural en esa localidad, harán posible que los sullaneros asocien Historia y Ecología, en un recorrido que les permitirá rememorar episodios asociados al protagonismo histórico de sus antepasados.
En la Argentina, la actividad fue promovida por el director del Museo del Mate, y en Sullana, la directora del Museo, apoyada por César Leigh Arias, Maby Olaya Guerrero, Luisa Chulli Castillo, Petronila Peña Acaro, Iris Altagracia Ruiz Merino, Frank Távara, Nedda Bel Yaksetig y otros sullaneros , se han propuesto organizar LA RUTA DEL ALGARROBO, teniendo como base la información que el señor César Leigh Arias, teniente alcalde de Sullana, y Sergio Zegarra Pezo, le han proporcionado, tanto como Gastón Cruz Alcedo, quienes le han alcanzado información sobre los algarrobos más antiguos de la ciudad de Sullana, que en algunos casos pasan de 200 años, como se ha comprobado al sometérseles a pruebas especializadas, tal como lo hicieron conocer Cruz Alcedo y Zegarra, e investigadores especializados en el tema.
Esta ruta del Algarrobo, que inicialmente se ha previsto para llevarla a cabo desde noviembre próximo, se hará a través de recorridos guiados con los estudiantes de los últimos grados de primaria y de toda la secundaria, así como de público en general, teniendo como referente a los algarrobos centenarios de la ciudad de Sullana, puestos en valor en los últimos meses; posteriormente se ubicarán otros en la jurisdicción provincial, para que esta ruta se proyecte también sobre los distritos sullaneros, y el campo, que con toda seguridad mantiene los más viejos algarrobos en la jurisdicción provincial.
Se ha previsto que La Ruta del Algarrobo, se iniciará, instalando una placa en el Km. 0 de ese recorrido, frente al cementerio San José de Sullana, en un algarrobo cuya sombra ha cobijado a viajeros, y aún al mismo Antonio Raimondi cuando pasó por Sullana en 1868. Esperemos que este comienzo se desarrolle con canto y baile, donde el tondero Mis algarrobos, sea el que marque el inicio de este intento de asociar Historia y Ecología, que tanta falta hace entre nosotros, ahora a las puertas de un nuevo fenómeno El Niño. Después vendrá, seguro, un monumento al algarrobo
Asimismo, como lo hemos constato con algunos miembros del equipo cultural constituido alrededor del Museo, en el valle del Chira hay muchas cruces, de esas que plantaron los misioneros y párrocos entre 1910 y años siguientes, como se registra en fuentes de la época. Hace unos meses, en reunión en el Municipio con la presencia de César Leigh, Luis Ernesto Mendoza Ramírez e Ysabel Mendoza de Gutiérrez, me enteré de la existencia de una cruz misionera en Huangalá, Chalacalá, y Piedra Rodada, así como esa, hay otras según nos informa Frank Távara Gamio. Esta circunstancia justifica, que se pueda organizar un recorrido alrededor de esas cruces con fines de conocimiento y deleite visual, que es como se hacen las actividades en los museos, de acuerdo a como lo ha propuesto Carmen Cruz.
Hay cruces en Querecotillo, La Horca, Lancones, en ambas márgenes del río Chira, de modo que el recorrido que seguro partirá desde Sullana, seguirá la ruta hacia Lancones, y regresando por el borde de la represa, se pasará a la otra orilla, y se tomará el camino de las cruces por la margen izquierda, que es el mismo itinerario de Martínez Compañon, fundador de Sullana, y el de Raimondi, en 1868. Seguro que para este gran recorrido, las actividades se coordinaran con el párroco, y se programará un recorrido mensual pagado, previa suscripción.
Esperemos pues, que con apoyo de las oficinas y autoridades competentes, estas propuestas concebidas desde el Museo de Sullana, promuevan el turismo en La Perla del Chira, y en todo la jurisdicción provincial, ya que en los últimos tiempos, hay el propósito de convertir a Sullana en un paraíso verde, teniendo en cuenta los propósitos concebidos, desde la oficina de la municipalidad de Sullana, que jefatura Sergio Arturo Zegarra Pezo.
Miguel Arturo Seminario Ojeda/Presidente Honorario de la Asociación Cultural Tallán.
