ERP. Piuranos y tumbesinos, recuerdan con mucho aprecio al desaparecido monseñor Oscar Ronald Cantuarias Pastor, quien falleció un 7 de noviembre del 2011. De un apostolado brillante en las regiones Piura y Tumbes, supo compartir sus responsabilidades religiosas, con sus preocupaciones por los problemas sociales, sobre todo tras el Fenómeno El Niño de 1982-83.
Se desempeñó como Arzobispo de esta región durante 25 años, tiempo que le permitió desplazarse por todo el territorio de su jurisdicción, celebrando y participando en actos religiosos, donde no perdía tiempo alguno, para recordar las responsabilidades territoriales y sobre todo, para los católicos, la misión que tienen para la Iglesia de la cual formaban parte.
Desde el Noticiario El Regional, tuvimos la oportunidad de conversar con él, cuando un político ya fallecido lo tildó de terrorista. Fue un escándalo nacional y regional, el sacerdote que más se había preocupado por el desarrollo de Piura y Tumbes, sintió mancillado su honor y buena reputación, por una frase ligera, dicha con gran irresponsabilidad, que permitió sea respaldado por la población en general.
En la región Piura se presentó una catástrofe natural en los años 1982-83 y las principales ciudades de la costa de las dos regiones, quedaron seriamente afectadas. Gobernada por el Arq. Fernando Belaunde Terry y en la ciudad de Piura don Francisco Hilbck Eguiguren; ante una necesidad de liderazgo evidente, asumió su responsabilidad, convocó a todos a unirse y exigir que Piura y Tumbes no sean parias.
Desde la Plaza de Armas de Piura, en una manifestación ampliamente concurrida, pidió al Gobierno Central que otorgue ayuda efectiva; la destrucción así lo ameritaba y sus palabras tuvieron eco. “La solidaridad no se come señor Presidente” fue la expresión que desde el fondo de su corazón y la sonoridad de su voz, salió desde este rincón para sensibilizar a un país centralizado.
Monseñor Oscar Cantuarias Pastor junto al Papa Juan Pablo II en su visita a Piura.
Gracias a monseñor Oscar Cantuarias Pastor, hoy el Gobierno Regional de Piura y el de Tumbes, municipalidades de ambas regiones, universidades nacionales e institutos públicos, cuentan con recursos para ejecutar las obras que prevean catástrofe. Todo ello, fueron jornadas de lucha llena de convicción y expuestas sin temor. Piura y Tumbes, le deben mucho a este personaje que trasunta lo religioso para erigirse como un representante social y porque no político.
Posteriormente se han repetido catástrofes similares que reclaman este tipo de actitudes, para el Arzobispado, se les ha pedido que “(…) sigamos el ejemplo de Monseñor Cantuarias, quien hizo del Señor Jesús la razón de ser de su vida. Que lo recordemos siempre con fe y gratitud en nuestras plegarias, y que le pidamos que atraiga sobre Piura y Tumbes, las bendiciones de Dios, Uno y Trino, que hoy tanto necesitamos”.
Monseñor Oscar Cantuarias Pastor, debería mantenerse, por todo lo que hizo en vida, en la imaginaria y el corazón de la población, indican quienes lo conocieron y destacan su legado.
