ERP. La madre del sacerdote Martín Chero, Carmen Nieves; no pudo soportar los momentos actuales y falleció causando hondas muestras de dolor y sobre todo condolencias al hijo, reconocido como un paradigma de la región Piura. “Gracias por no llevarme al hospital. Te amo”, fueron las palabras que le mencionó al hijo querido en su etapa de convalecencia y que le permitió recordar sus enseñanzas.
Las sentidas reflexiones del padre Martín Chero son emotivas, aun con el dolor propio como consecuencia de su progenitora, cree en el paso trascendente dado y lo menciona con sus palabras al indicar “Todos tenemos un tiempo. Creo que hice lo mejor con ustedes y los muchachos” frases que sintetizan el ejemplo que pudo transmitirles en sus largos años de enseñanza y cosechadas en vida para ver lo que hizo el hijo.
“Cuida tus comidas, no exageres en tu trabajo y sigue haciendo el bien a los pobres cómo te enseñé” es una frase que quedó latente y como inspiración para el apostolado del padre Chero.
Pero la madre del sacerdote no estuvo sola en su trance final; decenas de piuranos pidieron por su salud y por su vida y su hijo para otorgarla la extrema unción y la comunión ante lo inevitable. “Mi madre volvió a la casa del Padre hace 1 hora. Gracias a todos por sus oraciones y cercanía” escribió el padre Chero dando cuenta del hasta pronto de su progenitora.
Como se tiene conocimiento, el padre Martín Chero y su colega Luciano Maza, salieron a la palestra en un momento muy angustiante para Piura y se propuso conseguir oxígeno medicinal recibiendo el apoyo solidario de los piuranos que confiaron en su honradez y en sus propósitos y lo demostró con creces, pues gracias a él se pudo atender muchos enfermos. Lo visto, es una lección de lo que puede hacer una persona, una institución, que se levantan para liderar momentos difíciles.
Nuestras condolencias al padre Martín Chero, por la irreparable pérdida de su madre y nuestra creencia que seguirá adelante en su vocación de servicio a favor de la región Piura.
